lunes, 26 de agosto de 2024

EL CAMBIO CLIMÁTICO EN ISO 9001:2015 La Gestión de la calidad se pone a tono

Desde el año 2024, el Cambio Climático es tenido en cuenta en la norma ISO 9001 de forma explícita. 

Pese a ser una norma orientada al aseguramiento de la Calidad a través del cumplimiento de los requisitos de los clientes, el Cambio Climático puede afectar a la actividad de la organización y el desempeño de sus procesos. Y por tanto, debe ser analizado periódicamente para conocer sus posibles consecuencias.

La norma ISO 9001 en su capítulo 4, indica la necesidad de tener en cuenta el Cambio Climático en el análisis del contexto y las partes interesadas. Pero debemos entender que estas dos etapas, son el origen del diseño y planificación del Sistema de Gestión de la Calidad, y por tanto el cambio climático será referente en todos los procesos de la empresa.

El contexto y las partes interesadas

Tanto en el análisis del contexto externo e interno, deberemos determinar si el Cambio Climático afecta y por tanto es pertinente para el Sistema de Gestión de la Calidad. Para lo cual, identificaremos todos los efectos del cambio climático, y si alguno de ellos tiene una afección directa a nuestra organización. Asi como las previsiones para los próximos años, teniendo en cuenta nuestra zona geográfica y como afectan dichos cambios a nuestro desempeño.

Algunos de los efectos debidos al cambio del clima, son:

  • Subida de las temperaturas debido al calentamiento global.
  • Escasez de agua potable y reducción de caudales de los rios.
  • Incremento de las sequías y aumento de incendios forestales.
  • Desaparición de especies animales y complicación en el cultivo de alimentos.
  • Afección a la salud humana, y actividades realizadas en el exterior.
  • Tormentas más violentas e imprevisibles.
  • Aumento de la pobreza y el hambre, cambios migratorios.
  • Calentamiento del agua marina y subida del nivel de mar.

Nuestras partes interesadas, pueden tener necesidades y expectativas en relación al cambio climático. Algunas de ellas, como las relacionadas con: las administraciones públicas, los clientes, los trabajadores y la sociedad cada vez serán más notorias y relevantes. Pasando a ser requisitos obligatorios de nuestro Sistema de Gestión de la Calidad, y cumplir la norma ISO 9001.

Las regulaciones internacionales para tratar el cambio climático, cada vez son asumidas por un mayor número de paises. Y por tanto, pasar a formar parte de los requisitos de nuestra organización. La concienciación de la sociedad, y por tanto de nuestros clientes, trabajadores, proveedores... cada vez es mayor, y requieren de un mayor compromiso de las empresas para reducir las causas generadoras del cambio climático.

RECOMENDACIÓN: Dado que en la norma ISO 9001 se indica explícitamente la necesidad de determinar si el Cambio Climático es pertinente para la organización, es muy recomendable dejar alguna evidencia de que se ha realizado dicho análisis y a las conclusiones que se ha llegado.

Los riesgos del cambio climático

La gestión de Riesgos y Oportunidades del Sistema de Gestión de la Calidad, toma como referencia el análisis del contexto y las necesidades y expectativas de las partes interesadas. Por lo que la identificación de riesgos y oportunidades relacionados con el cambio climático, será cada vez más habitual y más relevante en las organizaciones.

Si no sabes por donde empezar, igual alguno de los siguientes ejemplos de riesgos vinculados al cambio climático te sirve de inspiración para tu empresa:

  • Sobrecalentamiento de máquinas que afectarían a su correcto funcionamiento, aumentando las averías.
  • Problemas en el aseguramiento de la cadena de frio en el transporte o en el almacenamiento de alimentos y medicamentos.
  • Incremento de accidentes laborales relacionados con las altas temperaturas como: los golpes de calor, desmayos o quemaduras solares en la piel.
  • Restricciones temporales en el uso de agua, tanto para el consumo humano como para el proceso productivo de la organización.
  • La subida de precios del agua y de materias primas que requieran de bajas temperaturas y alta humedad.
  • Nuevos requisitos legales relacionados con la reducción de consumos y generación de gases de efecto invernadero.
  • Errores en la medición y calibración de equipos de medida, en aquellos equipos de precisión que la temperatura influye en los resultados.
  • Incremento de los impuestos y tasas de los estados, para paliar los efectos del cambio climático.

Pero recuerda que también... ¡hay Oportunidades!

  • Diferenciarnos de nuestros competidores siendo líderes y pioneros en compromisos y acciones en relación al cambio climático.
  • Demostrar a nuestros clientes y empleados, el compromiso de la organización con el cambio climático. Mejorando su fidelización e implicación con la empresa.
  • Rediseño de nuestros productos y servicios para la reducción de consumos y emisiones, obteniendo nuevas certificaciones ambientales y ecológicas (ecodiseño).
  • Colaborar con entidades públicas en la toma de acciones para la mitigación del cambio climático, que mejore nuestra relación con la administración y nuestra imagen en la sociedad.
  • El cambio climático puede traer nuevas líneas de negocio para la organización, ya que va a suponer un gran número de cambios en la sociedad tal como la conocemos ahora mismo.
  • Aprovechar las subvenciones y ayudas públicas en relación al cambio climático, para la mejora o sustitución de máquinas e instalaciones antiguas y poco eficientes.

Los Riesgos y Oportunidades en la norma ISO 9001 2015

Una de las principales novedades de la norma ISO 9001 2015, es la necesidad de gestionar los Riesgos y las Oportunidades que afecten a los Procesos de la empresa. Éstos son debidos de los cambios del Contexto de la organización, tanto de su entorno como de sus partes interesadas. Y surgen del análisis de los factores internos y externos, vistos en puntos anteriores de la norma ISO 9001 2015.

En ocasiones sólo se habla de Riesgos, olvidando el término de Oportunidad. Ya que se considera que aprovechar una oportunidad que surja en un momento determinado, al final supone un riesgo si se intenta aprovechar. Por ejemplo: la oportunidad de entrar en un nuevo mercado, lleva asociado el riesgo de que no se alcancen los objetivos marcados, y por tanto se pierda toda la inversión realizada en tiempo y dinero.

En versiones anteriores de la norma ISO 9001, existía la posibilidad de abrir Acciones Preventivas que evitasen la aparición de No Conformidades en los procesos de nuestro Sistema de Gestión de la Calidad. La necesidad de tomar estas acciones debía surgir en el día a día de la actividad o en la Revisión del Sistema de Gestión, por lo que el número de Acciones Preventivas era muy escaso. Con la gestión de los Riesgos este problema desaparece, ya que en definitiva se trata de adelantarse a los problemas, proporcionando una sistemática para generar acciones preventivas que reduzcan o eliminen los riesgos. Convirtiendo el Sistema de Gestión en una herramienta más preventiva que correctiva, como era hasta ahora. Favoreciendo además, que las organizaciones apliquen mejoras de manera proactiva y no sólo reactiva, garantizando la mejora continua de las mismas.

Pese a que la norma ISO 9001 2015 no establece ninguna metodología específica para la gestión de los Riesgos y las Oportunidades, se puede tomar como referencia la norma ISO 31000 Gestión del riesgo: Principios y directrices. A continuación te presentamos una posible sistemática, basada en las indicaciones de esta norma, simplificada a sólo tres pasos:

Paso 1: Identificación de riesgos y oportunidades

La definición de los Riesgos y las Oportunidades quizás sea la tarea más crítica, dado que es fundamental no dejarse ningún Riesgo por identificar. El análisis del Contexto realizado con anterioridad, como pide la norma ISO 9001 2015, nos proporcionará una buena fuente de información para la identificación de los Riesgos.

Es importante dedicarle unos días a pensar en posibles riesgos, evitando cerrar la lista en una única reunión. En la identificación de los Riesgos y las Oportunidades, además de la Dirección, es bueno que participen todos los propietarios o responsables de los procesos.

Alguno de los Riesgos más comunes que se dan en la mayoría de las organizaciones, son los siguientes:

Relacionados con los sistemas informáticos: virus informáticos, pérdida o robo de equipos, rotura de servidores, falta de capacidad...

Relacionados con los empleados: huelgas, baja productividad, pérdida de talento, alta rotación, escaso compromiso con la organización...

Relacionados con el corte de servicios: Pérdida de acceso a internet, comunicaciones (teléfono), corte de luz...

Relacionados con multas y penalizaciones: multas por incumplimientos legales, pérdida del certificado ISO 9001, nuevos reglamentos o leyes que resulten de aplicación...

Relacionados con la Pérdida de competitividad: obsolescencia de la máquinas, personal poco formado, falta de nuevos productos (patentes), pérdida de clientes...

Relacionados con los cambios en el mercado: productos sustitutivos, aumento de la competencia, falta de crédito, caída de la demanda...

Relacionados con desastres naturales: incendios, inundaciones, terremotos, explosiones, accidentes...

Algunas de las Oportunidades que se suelen dar en las empresas en algún momento, son las siguientes:

Relacionados con el entorno político y económico: La caída del precio del petróleo, las ayudas públicas al I+D, o la mejora en las condiciones de financiación, pueden ser oportunidades para retomar inversiones paradas.

Relacionados con la evolución del mercado: Una crecimiento de la demanda puede dar la oportunidad de invertir en el crecimiento y diversificación de la organización.

Relacionados con las nuevas tecnologías: Las nuevas tecnologías ofrecen a las organizaciones la opción de mejorar sus productos, ofrecer otros nuevos, y optimizar su productividad y eficiencia.

Relacionados con los nuevos mercados: La economía global actual, ofrece un gran número de países y culturas donde vender nuestros productos.

Relacionados con el cierre de competidores: Si una empresa competidora o proveedora cierra, ofrece una gran oportunidad tanto en la adquisición de maquinaria y equipos, como en la de contratación de personal altamente cualificado y experimentado.

Relacionados con los nuevas necesidades: Los clientes, los consumidores y la sociedad en general, cambia sus hábitos de vida continuamente, y por tanto sus necesidades de compra. Lo que abre un gran número de nuevos nichos de mercado que cubrir.

Relacionados con nuevos reglamentos y leyes: La publicación de una nueva ley, puede dar la oportunidad a la empresa de ser la primera en adaptarse al nuevo escenario, y por tanto sacar ventaja a sus competidores.

Una vez definidos todos los Riesgos y las Oportunidades, pasaremos a evaluar su importancia.

Paso 2: Evaluación de riesgos y oportunidades

Una vez identificados todos los Riesgos y Oportunidades de nuestra organización, deberemos determinar cuáles de ellos vamos a tratar. Dado que los recursos para reducirlos suelen ser finitos, necesitaremos poder valorar cada uno de los riesgos para poder determinar su criticidad, y así dedicar los recursos disponibles en los más importantes.

Para poder valorar los riesgos de manera objetiva, evitando las opiniones subjetivas del evaluador, deberemos definir previamente los criterios que vamos a utilizar en la evaluación. Estos criterios deberán ser lo más cuantificables que podamos: evitando términos como "muchas veces, pocas o casi nunca", y utilizando otros como "más de 5 veces al día, menos de 1 vez al mes". Los dos criterios clásicos que se utilizan para este tipo de evaluación, son la probabilidad y el impacto. Y son suficientes para el cumplimiento de los requisitos de la norma ISO 9001 2015.

La Probabilidad: calcular la probabilidad de que un riesgo se materialice suele ser complicado. Para ello deberemos consultar las veces que nos ha sucedido en el pasado en la empresa, o buscar en internet información al respecto.

El Impacto: la mejor forma de poder comparar los impactos de diferentes riesgos, es calcular el coste económico en caso de materializarse. No sólo el coste de reposición de la maquinaria, de las materias primas o de los servicios que necesitaremos subcontratar, sino también el de todas las horas del personal propio implicado.

Una vez valorados todos los Riesgos y Oportunidades bajo estos criterios, deberemos aplicar una fórmula para determinar el nivel de riesgo de cada uno de ellos. Esta fórmula puede ser desde una simple suma o producto de la valoración de los criterios, a un algoritmo ponderado más complejo.


Ya hemos calculado el nivel de riesgo de cada uno de los Riesgos/Oportunidades, ahora deberemos determinar cuáles de ellos tratamos/aprovechamos. Evidentemente será aquellos con mejor puntuación, pero dado que los recursos son limitados, habrá que determinar un punto de corte. Éste debe ser determinado y aprobado por la Dirección, que asumirá el resto de riesgos como tolerables y el resto de oportunidades como aplazables.

IMPORTANTE: La evaluación de riesgos debe ser aprobada por la Dirección. Evitando así, incoherencias con los Objetivos y la Estrategia de la organización, y cumplir así los requisitos de la norma ISO 9001 2015. Por ejemplo: no es coherente que tengamos como objetivo mejorar la atención de los clientes, y aceptar como tolerable el riesgo de eliminar sus correos electrónicos por ser confundidos como "spam".

RECOMENDACIÓN: Se debe reevaluar periódicamente los riesgos y oportunidades, siendo lo más habitual al menos una vez al año o ante cambios importantes del Contexto. Disponer de una evaluación actualizada de loa Riesgos y las Oportunidades es requisito de la norma ISO 9001 2015.

Paso 3: Tratamiento de riesgos y oportunidades

Una vez realizada la evaluación de los riesgos y de las oportunidades, y saber cuáles de ellos vamos a tratar, es el momento de definir las acciones que vamos a realizar. En el caso de los Riesgos, estas acciones irán dirigidas a conseguir alguno de los siguientes objetivos:

Eliminar el Riesgo: Siempre será la mejor solución, pero pocas veces será posible. Para ello deberemos centrarnos en analizar el foco y origen del riesgo, para tratarlo y así eliminar el riesgo.

Reducir la probabilidad: Al tomar acciones sobre un determinado riesgo, podremos centrarnos en reducir la probabilidad de que éste se materialice. Y por tanto, reducir dicho riesgo. Por ejemplo: el invertir en un antivirus de garantías, reducirá la probabilidad de que los equipos informáticos de la organización sean infectados.

Limitar el impacto: La otra opción es realizar acciones para reducir su impacto en el caso de que suceda. Por ejemplo: ante el riesgo de ser penalizado o multado económicamente por una suma de dinero que cuestionaría la continuidad de la organización, podemos contratar un seguro.

Asumir el Riesgo: Cuando el riesgo puede considerarse tolerable o trivial, existe la opción de asumir dicho riesgo y por tanto no tomar ningún tipo de acción para corregirlo.

Desviar el Riesgo: subrogar el riesgo a un proveedor o colaborador es bastante habitual en actividades que no aportan valor añadido a nuestros productos. Por ejemplo: si la distribución de nuestros productos la realizamos con vehículos propios, podemos subcontratar el reparto y así desviar a la empresa repartidora el riesgo de accidente o penalizaciones por retrasos en la entrega.

Todas las acciones que vayamos a llevar a cabo, incluyendo su planificación con plazos y responsables, pueden ser definidos en un Plan de Acción específico. O integrados en la Planificación del Sistema de Gestión. Realizando un seguimiento periódico de todas las acciones, y corrigiendo las posibles desviaciones que puedan surgir.

Tomado de: https://isowin.org/

GESTIÓN DE LA CALIDAD Y LA ENMIENDA 1 DE 2024 A ISO 9001:2015/Amd 1:2024

En el entorno empresarial actual, la calidad en los procesos se ha vuelto una prioridad cada vez más crucial. 

Con la evolución constante de las demandas del mercado y las expectativas de los clientes, las organizaciones deben mantenerse actualizadas con los estándares más recientes como la ISO 9001:2015/Amd 1:2024 para asegurar la excelencia en sus productos y servicios. En este sentido, la norma ISO 9001 emerge como una herramienta esencial para garantizar la calidad en todos los aspectos de la operación empresarial. A continuación, examinaremos detalladamente este importante estándar y su impacto en la gestión de la calidad en el actual panorama empresarial.

La norma ISO 9001 representa un estándar internacional que establece los requisitos para un sistema de gestión de calidad (SGC) efectivo en una organización. Este estándar proporciona un sólido marco para que las empresas gestionen y mejoren continuamente la calidad de sus productos y servicios. La actualización de la norma ISO 9001 incorpora modificaciones y mejoras significativas en áreas clave como la satisfacción del cliente, la gestión de riesgos y la mejora continua, lo cual refleja los desafíos actuales en torno a la calidad y la excelencia operativa.

Consideración del Cambio Climático en la Calidad

La enmienda más significativa en ISO 9001:2015/Amd 1:2024 es la inclusión de una consideración sobre el cambio climático en el ámbito de la calidad. Esto se refleja en los siguientes puntos clave:

4.1 Agregar la siguiente oración al final del sub párrafo:

La organización debe determinar si el cambio climático es una cuestión pertinente.

4.2 Agregar la siguiente nota al final del sub párrafo:

NOTA 2 | Las partes interesadas relevantes pueden tener requisitos relacionados con el cambio climático.

La enmienda subraya la relevancia de evaluar y enfrentar los efectos del cambio climático en la calidad de los procesos empresariales. Ahora, las organizaciones deben analizar activamente si el cambio climático influye en su contexto operativo y tomar las medidas correspondientes en consecuencia. Esta adición refleja el compromiso de ISO con la adaptabilidad y la continua relevancia de sus estándares en un entorno dinámico en constante evolución.

Beneficios de la actualización ISO 9001:2015/Amd 1:2024

La integración del cambio climático en el ámbito de la calidad según la norma ISO 9001 ofrece una serie de ventajas para las organizaciones, que abarcan:

Evaluación Integral de Riesgos: Esto simplifica la detección de posibles amenazas y vulnerabilidades adicionales vinculadas a fenómenos climáticos extremos, variaciones en los patrones climáticos y otras variables ambientales.

Planificación de la Continuidad del Negocio: La consideración del cambio climático en el ámbito de la calidad ayuda a las organizaciones a elaborar planes de continuidad del negocio más sólidos. Esto implica analizar cómo los eventos climáticos extremos podrían afectar la disponibilidad de recursos críticos y cómo mitigar esos impactos para garantizar la operatividad ininterrumpida.

Reputación y Responsabilidad Social: Demostrar preocupación y acción con respecto al cambio climático puede mejorar la reputación de una organización y su percepción como un agente socialmente responsable. Esto puede ser esencial para atraer clientes, inversores y talento, así como para mantener buenas relaciones con la comunidad y las partes interesadas.

Cumplimiento Normativo: Cada vez más, las regulaciones y normativas exigen que las organizaciones consideren y atenúen los riesgos asociados con el cambio climático. Al incorporar esta consideración en la calidad, las empresas pueden garantizar el cumplimiento de los requisitos normativos y evitar posibles sanciones o penalizaciones.

Preparación para el Futuro: Al integrar esta variable en la calidad, las organizaciones se preparan mejor para enfrentar los desafíos venideros y adaptarse a un entorno en constante cambio.

Tomado dehttps://www.nueva-iso-9001-2015.com/