domingo, 7 de junio de 2015

Y PARA QUÉ UN SISTEMA DE GESTIÓN DE LA CALIDAD? Doce ventajas que justifican su implementación


Y para qué un Sistema de Gestión de la Calidad? Es muy frecuente esta pregunta entre los directivos, gerentes, presidentes y Alta Dirección, en general,  de las organizaciones cuando tienen su primer contacto con lo que para ellos representa un gasto más. Permítanos exponer nuestra postura.

En un mundo contemporáneo en donde los avances tecnológicos, en especial en las telecomunicaciones, se cuentan por docenas cada día; resultaría errado pensar que la "calidad" representa un factor diferenciador con la cada vez más radical competencia. Pues no lo es.  Pero sin ella es casi imposible competir y mantenerse en el mercado.

Este argumento cobra mayor validez cuando se enumeran y explican brevemente 12 de las múltiples ventajas de tener un Sistema de Gestión de la Calidad -SGC certificado en nuestra organización, sin importar tamaño ni el sector en el esta se desempeña (público o privado):
  1. Nuevos negocios: Es apenas lógico que una Sistema certificado otorgue incentivos para abrir nuevas puertas, así lo demuestran las estadísticas. Es mejorar adquirir bienes y servicios con sello de calidad
  2. Más y mejores relaciones comerciales: Igualmente, los contactos efectivos se multiplican, máxime cuando las organizaciones modernas que ya tienen su SGC certificado, propenden por relacionarse comercialmente con sus pares y de esta manera garantizar que sus proveedores también oferten bienes y servicios con sello de calidad.
  3. Mejores relaciones internas: Al implementar un SGC, es deber de la organización involucrar el personal con el objeto elemental de que su Sistema funcione.  Esto por sí solo implica estímulos y reconocimientos, y genera mayor empatía, confianza, armonía y eficiencia entre los colaboradores y entre los diferentes niveles de la organización.
  4. Diferenciación dentro de sector: Si bien, se habla que la "calidad" no es por definición un factor diferenciador (quizá hasta hace muy poco lo fuera), sí lo es entre las organizaciones del sector y por consiguiente, el SGC representa una ventaja en términos de competitividad.
  5. Valor agregado: Otra ventaja que genera un SGC al organizar el trabajo por procesos, es que agrega valor a los bienes y servicios de la organización.  Esto se explica en la medida en que se producen sinergias y ahorros importantes en los procedimientos.  Se le llama eficiencia y eficacia.
  6. Organización por procesos: Al reconocer los diferentes procesos que se desarrollan en una organización, igualmente se reconocen sus interacciones y por ende, se evidencia e ahorro al simplificar las operaciones, lo que llevado a términos monetarios, se traduce en ahorro en dinero y en mejora de la rentabilidad económica.  Esto si le interesa a las organizaciones (gerentes e inversionistas), en especial del sector privado.
  7. Se incrementa la rentabilidad económica y social: En los SGC se desarrollan tres (3) herramientas que necesariamente conllevan a la mejora de la rentabilidad: Todo se documenta, Todo se mide y analiza y Todo se planifica.  Esto en el ciclo de mejoramiento continuo llamado PHVA, se traduce en ahorro y por ende en mejoramiento de la rentabilidad.  Ahora bien, en el sector público, y también el el privado, igualmente se controla y conoce la rentabilidad social, hoy llamada Responsabilidad Social Empresarial - RSE.
  8. Clientes más satisfechos: El primer principio de los SGC bajo la Norma internacional ISO 9001, es el Enfoque al cliente (son 8 principios básicos); quiere decir que el SGC está pensado primordialmente para satisfacer a los clientes.  Por esta vía el objeto principal es mejorar los niveles de satisfacción de los mismos, los que al encontrar dicha satisfacción, son más fieles.  Son ellos la razón de existir de las organizaciones.
  9. Mejor capacidad de respuesta: El mercado actual se caracteriza por sus rápidos cambios, lo que demanda que las organizaciones sean cada vez más y mejor preparadas, técnica y tecnológicamente.  El SGC facilita y otorga este atributo.
  10. Facilita cumplimiento de normas: El SGC demanda que la organización este muy pendiente de conocer y aplicar los requisitos legales, los de la organización y los del cliente.  Este hecho facilita el cumplimiento de la normatividad que directa o indirectamente afecta el desempeño organizacional.
  11. Mejora de indicadores corporativos: Todo aquello que no se mide, difícilmente se podrá mejorar.  Bajo este principio, un SGC implica la medición e implementación de indicadores que permitan conocer de primera mano el comportamiento y desarrollo de la gestión, para una oportuna y correcta toma de decisiones.  Por ello, los indicadores bien formulados y aplicados son una importante herramienta de gestión corporativa.  Un SGC que funcione, sin duda mejora los indicadores de gestión.
  12. Alcance de metas y objetivos: La planeación, medición, análisis y mejora; son sin duda la piedra angular de los SGC.  Estos se concretan el ciclo PHVA y son una herramienta trascendental para una gestión exitosa, que la organización, y por su puesto la Alta dirección, sabrán usar para propender y buscar la mejora continua.
Ya con todas estas razones, todos argumentos razonables y probables, y muchas más, podemos concluir que si vale la pena la calidad..!

Nota: Recordemos que un SGC es una respuesta contemporánea a la demanda de bienes y servicios con criterios de calidad por parte de los clientes y del mercado en general. No es la solución a todos los problemas de una organización.