jueves, 18 de abril de 2019

LOS 5 PECADOS CAPITALES DEL EMPRENDEDOR

En la situación actual que vivimos, donde la tendencia general que está tomando el empleo es la de reducir su tiempo de duración, cada vez más y más personas deciden tomar el emocionante, desafiante y complejo camino del emprendimiento como una salida hacia la estabilidad, libertad financiera y realización personal.

En este artículo comentaremos los 5 pecados capitales que muchos emprendedores cometen a la hora de crear y gestionar sus negocios para que, así, si estás en proceso de crear una empresa, o ya tienes una, puedas aplicar estos consejos y evitar situaciones que no son deseables para ningún emprendedor.

Antes de empezar a comentar los principales fallos que muchos empresarios cometen en la gestión y dirección de sus negocios, comentemos un poco más en profundidad esta tendencia que existe al emprendimiento.

Hoy en día, en la época de crisis constante en la que nos hemos visto envueltos, donde el trabajo se ha convertido casi en un fin en sí mismo, conceptos como el autoempleo, el emprendimiento o la libertad financiera han adquirido mucha presencia en el imaginario colectivo.

En periodos de bonanza financiera el trabajo es un medio para poder llegar a la realización personal. Al disponer de unos ingresos fijos, el trabajador puede llevar un nivel de vida acorde con sus deseos y expectativas. Sin embargo, al entrar en crisis el poder adquisitivo de los trabajadores disminuye, a causa de esto, las empresas pierden poder económico y capacidad de contratar nuevos trabajadores, aumentando el índice de desempleo, convirtiéndose así en un bucle que solo acabará si se toman las decisiones correctas en los niveles más elevados del poder público.

Cuando las personas pierden la esperanza en lo que estos poderes pueden hacer para solucionar la situación, el espíritu autosuficiente de las personas aflora y deciden tomar las riendas de su propia situación y surgen conceptos como el autoempleo o encontramos un aumento de la tasa emprendedora de un país.

La figura del asalariado que trabaja durante gran parte de su vida por cuenta ajena para una misma empresa tiene los días contados y esta tendencia al emprendimiento (demostrada por el mayor aumento de la Tasa Emprendedora de España desde 2007) y el auge del autoempleo lo corroboran.

Una vez ya sabemos que esta tendencia existe, vamos a comentar los 5 pecados capitales que cometen los emprendedores al iniciar un negocio. Aclarar que las palabras que darán nombre a estos 5 errores serán palabras negativas a propósito, ¡No te sientas insultado!

1. Arrogancia
La confianza en uno mismo está bien y, por tanto, la confianza en una idea también está bien. Sin embargo, la confianza debe estar basada en datos, investigación, estudios de viabilidad. La fe ciega en que algo va a salir bien simplemente porque lo hemos pensado nosotros mismos no tiene cabida en el emprendimiento; a no ser que tus recursos sean ilimitados y decidas que quieres lanzarte a emprender a ciegas, que en el mundo empresarial sale extremadamente caro.

La investigación es el pilar de todo negocio. Estudios de viabilidad, estudios de mercado, tests de aceptación, experimentación… Mientras más minuciosa sea la investigación, más reduciremos el margen de error que un proyecto puede tener.

Una idea es como un hijo, la has tenido tú y sólo quieres que digan cosas bonitas sobre ella. Sin embargo, pedir a conocidos, amigos, familiares (o incluso consultores) que te digan todas las debilidades que ven en tu idea es algo especialmente necesario en este ámbito. Así evitaremos posibles errores que, una vez el proyecto se inicie, podrían resultar de gran perjuicio para nuestro bolsillo. Tendremos, así, la posibilidad de comprobar de primera mano la viabilidad de nuestra idea.

Resumiendo, ante el exceso de confianza: investigación, investigación e investigación. La base de un proyecto que busca el éxito siempre es la planificación e investigación previa. Las respuestas están en el mercado, no en tu oficina.

2. Individualismo
Roma no se construyó en un día, y mucho menos por una única persona.

Trabajar en equipo es realmente importante en el mundo empresarial. Rodearte de personas en las que confíes es de vital importancia para así lograr grandes sinergias dentro de un gran equipo.

Cuando hablamos de la importancia de que cuentes con personas en las que confíes no hablamos de familiares o amigos, de hecho, a no ser que este familiar o amigo haya tenido un negocio de éxito en el pasado, es lo menos recomendable en este caso.

“Llevar el trabajo a casa” es algo negativo, que puede convertirse en perjudicial para tus relaciones familiares o de amistad si tu asociado se trata de una persona que lo único que puede aportar es su complicidad.

Con personas de confianza nos referimos a compañeros de trabajo, de la universidad, viejos conocidos... que en el pasado han probado ser capaces de demostrar compromiso con sus tareas y, a su vez, fomentar con su actitud un buen clima de trabajo.

Para concluir con este común error: evita asociarte con personas que lo único que pueden acarrear son problemas y no soluciones. Sin embargo, no seas individualista e intentes hacerlo todo por ti mismo, ya que eso solo puede salir mal.

Confiar en personas que en el pasado han demostrado buenas capacidades y actitud, o en otros profesionales en tu sector, es un punto muy a favor del emprendedor que busca el éxito para su negocio.

3. Egoísmo
“Do ut des”, dar para que me des, este debe ser el lema de todo empresario.

Contar con buenos contactos en distintas áreas que puedan ser de utilidad para tu empresa es algo esencial ya que facilitará en muchos casos la tarea de encontrar nuevas fuentes de recursos, servicios que facilitarán el desempeño de tu actividad… El desarrollo de vínculos sinérgicos para tu empresa es algo que todo emprendedor debería procurar.

Sin embargo, en muchos casos pecamos de egoístas y solo buscamos recibir sin, en ocasiones, dar de vuelta a tus contactos lo que una vez ellos te facilitaron.

Cuidar este tipo de relaciones es algo fundamental ya que, aunque hasta el momento no hayas necesitado nada de su parte, puede que en el futuro lo necesites y debemos procurar cubrirnos las espaldas con la mejor armadura ante esto: la generosidad.

Un almuerzo, una invitación voluntaria a colaborar con ellos desinteresadamente, ofrecerse de forma honesta a ayudarlos a solucionar cualquier problema que puedan tener… Todo cuenta a nuestro favor. Posiblemente en el momento suponga un coste, ya sea de tiempo o de recursos, pero en el futuro podrá convertirse en un retorno en forma de colaboración con tu empresa por su parte.

Dar, dar y dar para recibir. El egoísmo es la vía más rápida al fracaso, la generosidad es un camino firme hacia el éxito.

4. Desconfianza
“No vale con ser bueno, hay que parecerlo”.

Es posible que, a día de hoy, todavía haya empresarios que vean la publicidad como algo secundario. Que vean la publicidad como un gasto cuando, en realidad, se trata de una inversión.

Como destaca la frase que inicia este apartado, no solo hay que ser bueno, sino parecerlo. En el mundo actual donde la imagen lo es todo (o casi todo), no tener una buena presencia en medios publicitarios (ya sean tradicionales o emergentes) es un lujo que no muchas empresas pueden permitirse.

De hecho, ninguna empresa puede permitirse no hacer publicidad. De una forma u otra, darse a conocer es lo más importante para una empresa. Y no solo importa darse a conocer, sino mantener una correcta cadencia de comunicación con los públicos a los que nos dirigimos.

Coca-Cola, por ejemplo, es el segundo término más conocido del mundo, sólo por detrás de “Ok”. Y, sin embargo, hacen acciones de publicidad día sí, día también (solo que no siempre la hacen de la misma forma, evitando así la saturación de sus públicos).

Desconfiar a día de hoy de la publicidad no está al alcance de nadie y hacerla es primordial para cualquier empresa. Además, existen muchos tipos de publicidad, para distintos tipos de empresas, presupuestos, objetivos y públicos. ¡No todo es televisión!

Hacer una inversión en publicidad (no asumir un gasto) acorde con las expectativas de crecimiento de tu empresa facilitará en gran medida el camino que tu negocio seguirá hacia su consolidación.

5. Avaricia
Pensar que tú puedes hacerlo todo para así ahorrar costes es un error. Contar con buenos profesionales en los que delegar algunas de las tareas de tu empresa supondrá, en muchas ocasiones, un menor coste que intentar hacerlas tú mismo.

Siguiendo con el ejemplo anterior, la publicidad es necesaria, sin embargo, hacer tú mismo la publicidad de tu empresa puede resultar contraproducente (a no ser que en tu caso cuentes con estudios de publicidad y diseño).

En el caso de la publicidad, hacerla tú mismo tendrá una repercusión negativa en la imagen de tu empresa que se verá asociada a una mala identidad visual proyectada. Sin embargo, algunas tareas mucho más específicas y que requieren una gran precisión para así evitar multas u otro tipo de sanciones, requieren de forma obligatoria (por tu bien y el de tu empresa) que cuentes con profesionales que puedan asegurarse de que todo se está llevando a cabo de la mejor forma.

Un ejemplo de los aspectos más delicados que cualquier empresa debe cuidar al detalle es su contabilidad y la correcta tributación de sus impuestos. De no llevar un minucioso control de este tipo de cuestiones la empresa puede padecer grandes percances: desde multas, sanciones, hasta llegar a sufrir procesos judiciales.

En caso de que no se disponga el tiempo suficiente para encontrar al mejor profesional para tu caso particular, podemos consultar diversos comparadores de servicios online que nos permitirán ahorrar en el recurso más importante de cualquier empresa: el tiempo.

Resumiendo
Para que tu idea se convierta en una empresa de éxito es fundamental que mantengas tu mente abierta a tu entorno. Ignorar tu entorno (competencia, posibles colaboradores, tu público…) es sinónimo de fracaso.

Permanecer atento a las oportunidades y a tus fortalezas, sin perder de vista las amenazas y conociendo tus debilidades, propiciará que tu negocio se sitúe en una tendencia al alza.

¿Has cometido alguno de estos pecados capitales del emprendedor? ¿Cuál otro agregarías a la lista? Deja tus comentarios y aportes acerca del tema.

Este artículo ha sido redactado por asesoria-fiscal.org, un comparador online de las mejores asesorías fiscales de España por provincia, en colaboración con Negocios y emprendimiento.

Tomado de: https://www.negociosyemprendimiento.org/