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viernes, 11 de octubre de 2024

CONTROLES OPERACIONALES EFICACES DENTRO DE LA ISO 14001

La norma ISO 14001 establece un sistema de gestión ambiental (SGA) que ayuda a las organizaciones a gestionar sus responsabilidades ambientales de manera eficaz. Uno de los elementos clave de este estándar son los controles operacionales. 

Estos controles son fundamentales para garantizar que las actividades, productos y servicios de una organización no solo cumplen con las regulaciones ambientales, sino que también contribuyen a la mejora continua en la gestión de impactos ambientales.

¿Qué son los controles operacionales?

Los controles operacionales son procedimientos y medidas establecidos para gestionar y controlar los aspectos ambientales significativos de una organización, es decir, aquellos que tienen o pueden tener un impacto ambiental negativo. Estos controles garantizan que las operaciones diarias se lleven a cabo de manera que se minimicen los riesgos para el medio ambiente.

Características de controles operacionales eficaces:

Identificación de aspectos ambientales: La primera etapa es identificar los aspectos ambientales significativos relacionados con las actividades, productos y servicios de la organización. Esto incluye evaluar qué operaciones podrían tener un impacto en el agua, el aire, la tierra, la biodiversidad, etc.

Establecimiento de procedimientos claros: Para que los controles operacionales sean eficaces, deben existir procedimientos documentados que indiquen cómo gestionar esos aspectos significativos. Estos procedimientos deben ser claros, fáciles de seguir y adaptarse a las operaciones diarias.

Asignación de responsabilidades: Es importante que se asigne personal responsable de llevar a cabo cada control operacional. Esto asegura que haya una persona o equipo a cargo del cumplimiento y seguimiento de estos controles.

Monitoreo y medición: Un control eficaz implica el monitoreo constante. Es necesario medir regularmente los resultados para asegurarse de que los procedimientos están funcionando como se espera y realizar ajustes si es necesario.

Capacitación del personal: Los empleados deben ser conscientes de los controles operacionales aplicables a sus tareas. La capacitación adecuada y continua es fundamental para garantizar que los procedimientos se sigan correctamente.

Evaluación y revisión periódica: La efectividad de los controles operacionales debe revisarse regularmente para garantizar que siguen siendo adecuados para minimizar los impactos ambientales, especialmente si hay cambios en los procesos o en la legislación aplicable.

Preparación ante emergencias: Los controles operacionales deben incluir planes de contingencia para emergencias ambientales, como derrames de sustancias químicas o emisiones no controladas. Estos planes permiten una respuesta rápida y eficaz ante incidentes que puedan afectar al medio ambiente.

Ejemplos de controles operacionales:

Gestión de residuos: Procedimientos para la segregación, almacenamiento y disposición de residuos peligrosos y no peligrosos.

Control de emisiones: Uso de tecnologías para reducir las emisiones de gases contaminantes en procesos industriales.

Conservación de recursos: Procedimientos para el uso eficiente del agua, energía y otros recursos naturales, como la implementación de sistemas de riego eficientes en agricultura o la reducción de consumo de energía en la industria.

Mantenimiento de equipos: Garantizar que los equipos que pueden tener un impacto ambiental (por ejemplo, maquinaria que emite gases) se mantengan adecuadamente para reducir el riesgo de fallos y emisiones no controladas.

En resumen, los controles operacionales eficaces dentro de la ISO 14001 son aquellos que permiten a la organización gestionar sus impactos ambientales de manera proactiva, asegurando el cumplimiento de las normativas y contribuyendo a la mejora continua de su desempeño ambiental.

Tomado de: https://isotools.org/

 

jueves, 5 de mayo de 2022

CÓMO PLANIFICAR Y ACTUAR ANTE EMERGENCIAS SEGÚN LA NORMA ISO 14001?

Durante el artículo de hoy queremos hablar sobre los requisitos que establece el punto 8.2 “Preparación y respuesta ante emergencias” y de los elementos clave para cumplir con estos.

Los aspectos ambientales se encuentran relacionados con los requisitos de la norma ISO 14001. Se debe incluir la referencia con la identificación, planificación, gestión, respuesta y evaluación de aquellas situaciones de emergencia que se pueden producir en la organización y que deben tener capacidad y potencial de afectar de forma negativa a la salud humana, al entorno natural y las diferentes partes interesadas.

Las emergencias y los aspectos ambientales en la norma ISO 14001 2015

El Sistema de Gestión Ambiental nos indica que no se deben pasar por alto las diferentes situaciones de emergencia que sea previsibles. Ante una emergencia, ésta debe contar con un plan establecido y probar diferentes pautas de actuación con un claro sentido previsor en cuanto a los aspectos potenciales.

Debemos recordar que un aspecto ambiental puede definirse como un elemento o conjunto de actividades, servicios o productos de la organización que interactúa o pueden hacerlo de algún modo con el entorno natural. El resultado de la acción de los aspectos ambientales que provoca un cambio en el medio ambiente, ya sea beneficioso como perjudicial, se denomina impacto ambiental.

De esta manera, en el apartado 8.2 de la norma ISO 14001 2015 se establece que es necesario identificar y evaluar los aspectos ambientales que se encuentran unidos a situaciones de emergencia potencial. Para esto es necesario dibujar el escenario de cada una de las emergencias dejando como información documentada los procedimientos de trabajo para planificar la actuación que se debe llevar a cabo en el caso de que dicha situación de emergencia se produzca.

Este plan de actuación deberá contemplar todas las acciones que debe realizar para prevenir que se produzca dicha situación de emergencia, por lo que es necesario mantener bajo control y reducir, en la medida de lo posible, los aspectos ambientales asociados a dicha emergencia cuando se produce y mitigar el impacto en el entorno natural una vez que se ha producido.

Podemos llegar a la conclusión de que planificar la respuesta de la organización frente a emergencias se convierte en una tarea muy complicada, pero si nos fijamos bien tenemos muchas fuentes de información a nuestro alcance que ya nos dan una clara dirección a seguir.

Es importante tener en cuenta que el plan de actuación debe ser conocido por todo el personal implicado y que, para ello, debe realizar acciones formativas y recordatorios siendo necesario que se realice según lo establecido y permita controlar y mitigar los efectos que genera la situación de emergencia lo antes posible una vez se ha producido.

Este plan de actuación deberá contemplar todas las acciones que debe realizar para prevenir.

Por cada emergencia identificada hay que establecer una serie de actuaciones que tienen que quedar recogidas como información documentada, y que contemplarán, aunque no de forma completa o excluyente, los siguientes elementos:
  • Escenario, como por ejemplo, incendio, fuga, derrame, etc.
  • Descripción de la emergencia.
  • Gravedad.
  • Efecto sobre el entorno natural una vez producido.
  • Aspectos e impactos ambientales relacionados con la emergencia.
  • Medidas preventivas ya disponibles y en funcionamiento, es importante esta puntualización ya que de nada sirve disponer, por ejemplo, de extintores en las instalaciones si estos no se han revisado en los últimos diez años y muchos se encuentran descargados.
  • Acciones planificadas en situación de emergencia.
  • Responsables, recurso y verificación de estas acciones, así como a quién avisar en situaciones de emergencia como bomberos, etc.
  • Gestión de aspectos e impactos producidos en la emergencia.
La relación con este requisito, es necesario que sea revisado y adaptado a la situación cambiante de la organización para que se convierta en un documento vivo que sea eficiente en el momento en que sea necesario su utilización.

Los simulacros

La norma ISO 14001 2015, Sistema de Gestión Ambiental, además se indica como requisito la realización de simulacros en situaciones de emergencias que permiten poner el funcionamiento de las acciones planificadas, por lo que sirve de formación y evalúen su eficacia de cara a mejorar su planificación, además de corregir y matizar algunos puntos que han podido quedar no del todo definidos o hasta olvidados de forma inicial.

Es necesario tener presente la eficacia y el valor de los simulacros, por lo que se lleva a cabo de forma activa a lo largo de años en todos los escenarios posibles como oficina, instituciones, colegios, etc. Algunos simulacros pueden llevarse a cabo según la colaboración con los cuerpos de seguridad y emergencia, aunque no es estrictamente necesario y deberá ser valorado por la organización de cara a posibilidades y disponibilidad de las diferentes partes interesadas.

Tomado de: https://www.nueva-iso-14001.com/