lunes, 18 de noviembre de 2019

9 PASOS PARA REALIZAR UN ANÁLISIS DE NECESIDADES DE CAPACITACIÓN O CÓMO REALIZAR UN ANÁLISIS DE NECESIDADES DE CAPACITACIÓN


Cuando una organización desea aplicar programas de formación, aprendizaje y de entrenamiento debe saber con qué fin lo está haciendo, destacando así la importancia de realizar un análisis de necesidades de capacitación.

Este análisis de necesidades de capacitación permite a las organizaciones descubrir cuáles son los puntos débiles que se desean mejorar y aplicar la metodología más apropiada para ello. Si no se realiza el análisis de necesidades de capacitación, las organizaciones se arriesgan a aplicar metodologías incorrectas que implican un esfuerzo en gastos, tiempo y recursos que no solucionan el problema en cuestión.

En este artículo vamos a detallar los pasos para identificar los puntos claves de un análisis de necesidades de capacitación.



1. Determinar los resultados deseados

El primer paso consiste en determinar qué resultados se desean obtener al aplicar un programa de mejora. Normalmente, estos programas están vinculados a un objetivo específico de la organización que puede afectar a un determinado empleado, unidad, departamento o incluso a la totalidad de la organización.

Es importante tener este primer punto en cuenta a la hora de realizar el análisis de necesidades de capacitación, ya que todo irá en relación con el objetivo y los resultados deseados. Por ejemplo: si se desea saber que se está mejorando la relación con clientes, los resultados deseados se sabrán gracias al grado de satisfacción de los mismos.


2. Relacionar los resultados deseados con las competencias de los empleados

Existen diversas formas de trabajar y de organizarse a la hora de conseguir los resultados deseados dependiendo de diversos factores. En este punto, se hace énfasis en los empleados, siendo cada uno de ellos único y destacando en diversos campos.

Conocer bien a los empleados es vital para poder asignarles tareas y responsabilidades de la forma más eficiente que ayuden a conseguir los resultados deseados. Recabar información sobre ellos y sus competencias se puede hacer mediante entrevistas, sesiones en grupo, encuestas, etc.

Independientemente del método utilizado para la recolección de información, los resultados de la recopilación de datos deberían dar lugar a la compresión de cómo de importante es cada competencia para alcanzar los objetivos marcados.

Un ejemplo de escala de calificación para evaluar la importancia de una competencia es:

¿Qué tan importante es para un buen desempeño laboral? A. En absoluto; B. Un poco; C. Algo; D. Considerable; E. Extremadamente. 

Un correcto conocimiento de los empleados y de su asignación junto a una correcta motivación ayuda en gran medida a alcanzar los resultados deseados en un análisis de necesidades de capacitación.


3. Identificar las competencias que se pueden entrenar

Este punto guarda una estrecha relación con el anterior, ya que a la hora de conocer a los empleados y sus habilidades se observará que existen competencias que no se pueden mejorar o que resultan demasiado costosas en términos de tiempo y recursos.

Una vez establecidas las competencias clave del punto anterior, la organización debe saber qué competencias clave se encuentran cubiertas por sus empleados, qué competencias se pueden mejorar fácilmente a través de programas de aprendizaje y qué competencias no se cubren, dando lugar a la posibilidad de tener que contratar a personas expertas en dicha competencia carente.



4. Evaluar las competencias

Al conocer las competencias necesarias para alcanzar los resultados deseados, la organización debe saber cuáles de sus empleados las poseen y, para ello, se emplean evaluaciones o tests.

Se suelen emplear encuestas de evaluación del desempeño para evaluar comportamientos observables. Profesionales especializados realizan estas pruebas, o incluso las diseña, para luego poder analizar y puntuar los resultados.

Sin embargo, no todas las competencias se pueden observar y medir en estas encuestas. Algunas competencias y otros elementos, como la personalidad, se conocen a través de tests específicos y profesionales. Los especialistas pueden establecer escenarios en los que un empleado debe adoptar distintos roles dentro de la organización y observar cómo actúa en base a su personalidad y competencias. De esta forma, se puede conocer qué empleados encajan mejor en cada puesto según sus habilidades.


5. Determinar las brechas de rendimiento

Cada organización debe estimar diferentes niveles de rendimiento asociados a cada competencia, de forma que se aplique una estandarización. Ésta varía según la organización, ya que cada una es diferente.

Es importante establecer esta estandarización para que la organización pueda saber cuántos de sus empleados rinden por encima de la media y cuántos no, pudiendo así planificar programas de aprendizaje y entrenamiento para aquellos que no llegan al nivel.



6. Priorizar las necesidades a entrenar

Conociendo las el número de empleados a entrenar y las competencias necesarias, la organización debe priorizar en base al grado de importancia y las necesidades.

De esta forma, se pueden aplicar los programas de entrenamiento y aprendizaje pertinentes, optimizando de la forma más eficiente el tiempo y los recursos necesarios.



7. Determinar el programa de entrenamiento

La organización debe estimar cuál es el mejor programa de entrenamiento y aprendizaje para su plantilla en un análisis de necesidades de capacitación. Existen diversas formas y metodologías para ello: en el trabajo, coaching, clases, online, libros, seminarios, etc.

Lo más importante de este punto consiste en encontrar una metodologías que esté bien estructurada e impartida, ya que es importante saber comunicar y enseñar de la forma más efectiva posible las competencias necesarias a los empleados.



8. Realizar un Análisis Costo-Beneficio (ACB)

En este punto se estudian los costes asociados a las metodologías de entrenamiento y aprendizaje empleados y todos los factores relacionados:
  • Tiempo de entrenamiento y de aprendizaje requerido.
  • Desarrollo del contenido del aprendizaje.
  • Cómo se imparte el contenido del aprendizaje.
  • Productividad que se pierde al emplear tiempo en atender al programa.
  • Gastos en conceptos de viajes y desplazamientos.
Se debe tener en cuenta que dependiendo de la metodología escogida en el punto 7 se consigue un determinado grado de efectividad que podría ser el más adecuado pero es más caro, o es menos efectivo pero más barato. La organización debe pensar sobre esta situación y buscar un punto de equilibrio que consiga una buena efectividad y un coste razonable. 



9. Planificar la evaluación del programa de aprendizaje 

El último paso consiste en poder evaluar si el entrenamiento y aprendizaje empleado ha funcionado y si ha sido positivo. Se debe buscar que el resultado haya sido satisfactorio otorgando las competencias buscadas, que haya contribuido en los objetivos y resultados deseados y que los empleados hayan estado cómodos con el programa empleado.

Es importante que para los empleados el programa sea una experiencia positiva. De lo contrario, el programa en sí puede ser de buena calidad y ayude a alcanzar las competencias que se buscan pero la falta de motivación por parte de los empleados hará que sea algo contraproducente.

TOMADO DE: https://www.escuelaeuropeaexcelencia.com

TENDENCIAS EN LA CAPACITACIÓN EN LAS ÁREAS HSEQ


Capacitar empleados en una organización es una labor que va más allá de comunicar unas instrucciones, enseñar unos procedimientos y esperar que los nuevos empleados memoricen y asimilen esa información. 


La capacitación en las áreas HSEQ requiere seguir tendencias que se mueven alrededor del compromiso, la tecnología y el uso de herramientas como los dispositivos móviles y la realidad virtual, que han cambiado radicalmente la forma en la que las organizaciones diseñan programas de capacitación en las áreas de calidad, salud, seguridad en el trabajo y gestión ambiental.


En adelante, hacemos un repaso a estas tendencias en la capacitación en las áreas HSEQ, con el ánimo de contribuir de forma efectiva al éxito de nuestros suscriptores que se desempeñan como líderes de sistemas de gestión en sus organizaciones.


Tendencias en la capacitación en las áreas HSEQ

Estas son algunas de las próximas tendencias en capacitación en las áreas HSEQ a las que los lideres de los equipos de trabajo deben prestar atención:



Programas de aprendizaje a distancia

Muchas organizaciones cuentan con instalaciones en varias ubicaciones. Los equipos de trabajo distribuidos en esos emplazamientos tienen diferentes necesidades de capacitación en las áreas HSEQ, aunque comparten objetivos comunes alineados con la estrategia de negocios de la organización.

Construir un programa de capacitación sólido y coherente, a distancia, fortalece la comunicación, aumenta la participación e incrementa la efectividad de la gestión QHSE.

Formación online para los profesionales de los Sistemas de Gestión es cada vez más importante ya que no sólo permite un mayor alcance a la organización sino la flexibilidad necesaria para compaginar el aprendizaje con las tareas diarias.


Uso de la Realidad Virtual

La capacitación en las áreas HSEQ debe ir un poco más allá de entregar un documento que contiene una descripción de procedimientos. El entrenamiento debe representar el incidente de la forma más real posible, entendiendo que algunos sucesos catastróficos que involucran serias amenazas a la salud, desastres naturales o químicos tóxicos, por ejemplo, no resulta prudente recrearlos con tanta naturalidad.

La realidad virtual y aumentada cambia la forma en la que las organizaciones y sus empleados pueden prepararse para afrontar un incidente de alto impacto negativo. A través de este tipo de programas de capacitación, los trabajadores pueden ver y escuchar todo lo que sucedería durante una situación de riesgo, sin que corra peligro su integridad física.


El aprendizaje social

Las redes sociales son un factor determinante en la sociedad moderna. Junto a las herramientas de colaboración social fomentan la participación de un mayor número de personas en los procesos de capacitación en las áreas HSEQ.

De esta forma, es posible compartir documentos, participar en foros de discusión, colaborar en espacios de opinión como blogs, publicar videos didácticos y muchas acciones más.

El aprendizaje social permite a las personas interactuar entre sí, y a las organizaciones involucrar con éxito los programas de capacitación a un mayor número de trabajadores.

Uno de los factores que más valoran nuestros alumnos es la interacción a través de nuestro Campus Virtual con los docentes y también otros profesionales de su ámbito de trabajo con los que compartir experiencias, debates y retos.



Aprendizaje adaptativo

El aprendizaje adaptativo, a diferencia de los programas de educación tradicional, hace que los trabajadores aprendan a su propio ritmo y en los momentos oportunos para ellos.

En un proceso de aprendizaje adaptativo, el empleado es monitoreado de forma individual determinando así, cuál es el enfoque pedagógico ideal para él. Esto resulta especialmente exitoso en empleados jóvenes, que ingresan al conjunto de la fuerza laboral con expectativas de flexibilidad e interacción.
Alinear la capacitación en las áreas HSEQ con los objetivos de negocios de la organización

La capacitación debe estar alineada con los objetivos de negocios de la organización. El aprendizaje debe afianzar valores en los trabajadores, como el compromiso, e incrementar el rendimiento incorporando actividades de retroalimentación en tiempo real, basadas en las operaciones comerciales.

Esto asegura que los trabajadores adquieran un mayor conocimiento acerca de los objetivos de negocios, y que su trabajo obtenga un alto impacto en la estrategia comercial de la organización.

Tomado de: https://www.escuelaeuropeaexcelencia.com

LA EVOLUCIÓN DE LAS NORMAS ISO EN EL MUNDO

La ISO (International Standard Organization) es la Organización Internacional de Normalización. 

Los miembros que componen esta organización son los organismos nacionales de normalización de países industrializados, en desarrollo y en transición, de todos los tamaños y de todas las regiones del mundo. 

El portafolio de ISO provee de herramientas prácticas a las organizaciones, los gobiernos y la sociedad, para el desarrollo sostenible de las variables económicas, ambientales y sociales.

Desde su nacimiento el número de certificaciones en las distintas normas ISO ha ido incrementándose, con distintas particularidades. La fluctuación en el número de certificados de un año a otro se debe en gran parte a la variabilidad en la respuesta de los organismos de certificación individuales.

La ISO no lleva a cabo la certificación de sus normas, sino que son las organizaciones las que para obtener la certificación de una norma ISO deben ponerse en contacto con un organismo de certificación independiente. Por ello, en el análisis que vamos a realizar a continuación contaremos con el número de certificados expedidos por organismos de certificación que han sido acreditados por los miembros del Foro Internacional de Acreditación (IAF). Dicho análisis tratará la evolución en algunos países de dos de las normas ISO más relevantes, la ISO 9001 y la ISO 14001.

ISO 9001

La ISO 9001 es la norma internacional que se aplica a los sistemas de gestión de calidad (SGC) y que se centra en todos los elementos de administración de calidad con los que una organización debe contar para tener un sistema efectivo que le permita administrar y mejorar la calidad de sus productos o servicios.

España
En el año 1993 se llevaron a cabo unos 320 certificados en esta norma, los cuales se han ido incrementando hasta llegar a certificarse un total de 68.730 en el año 2008. Este incremento sufre un estancamiento durante los años 2009 y 2010, con cerca de 60.000 certificaciones, disminuyendo mínimamente en el año 2011 y volviéndose a estancar cerca de los 60.000 en el año 2012, hasta disminuir considerablemente, certificándose un total 36.005 en el año 2014.

Chile
Durante el año 1994 no se certificó ninguna organización en esta norma y su crecimiento comenzó en 1995 con un total de 21 certificados emitidos. Ha llevado un desarrollo lento hasta el año 2003, donde se registraron 340 certificados emitidos, y desde entonces su crecimiento ha despegado considerablemente hasta alcanzar las 4.619 certificaciones en el año 2009. Después sufrió una pequeña reducción en 2011, con 3.663 certificaciones y continúo creciendo hasta situarse en unos 4.514 certificados emitidos en el año 2014.

Colombia
No se conocen certificaciones durante los años 1993 y 1994, siendo 49 el número de certificaciones en esta norma las registradas en el año 1995. Su crecimiento ha sido lento y continúo, sin disminuciones apreciables, situándose en el año 2014 con un total de 14.539 certificados emitidos.

México
La evolución de certificación en este país ha sido totalmente irregular. Con un discreto número de certificaciones en el año 1993, 24 en total, ha ido creciendo hasta llegar a certificar en el año 2002 la suma de 2.508 y disminuir a las 1.437 certificaciones en el año 2003. Desde ahí se han ido produciendo incrementos y disminución en relación a la certificación de la norma hasta situarse con 7.902 certificaciones en el año 2014.

Perú
No es hasta el año 1995 cuando comienzan a emitirse certificaciones en esta norma, con una cifra de 7 certificados en ese año. El incremento es paulatino, llegando a 270 certificaciones en el año 2002. Se produce una pequeña disminución en el año 2003 con 141 certificaciones y, continúa su crecimiento hasta llegar a su punto álgido en el año 2010 con un total de 1.177 certificaciones en la norma. Se vuelve a producir una reducción en el año 2011 con 835 certificaciones y aumenta hasta llegar a contar en el año 2014 con 1.076 certificaciones.

ISO 14001

La ISO 14001 es la norma internacional que se aplica a los sistemas de gestión ambiental (SGA), que ayuda a su organización a identificar, priorizar y gestionar los riesgos ambientales, como parte de sus prácticas de negocios habituales.

España
Comienza su certificación con 573 certificados emitidos en el año 1999. Desde ese momento su crecimiento avanza hasta situarse en el año 2010 con un total de 18.347 certificaciones. Sufre una pequeña recaída en el año 2011 con 16.341 certificados emitidos y crece en el año 2012 con un total de 19.470. Después de esto ha disminuido el número de certificaciones emitidas situándose con 13.869 certificados en el año 2014.

Chile
La evolución de certificaciones emitidas en este país ha sido bastante irregular. Inicia en el año 1999 con la insignificante cifra de 5 certificados emitidos. Desde ese momento crece hasta situarse en el año 2004 con 312 certificaciones, disminuye en el año 2005 con 277 certificados emitidos y reanuda su crecimiento alcanzando en el año 2008 las 686 certificaciones. Disminuye en 2009, aumenta en 2010, vuelve a disminuir en 2011 y retoma el crecimiento registrándose en el año 2012 un total de 1.080 certificados emitidos. Desde ese año disminuye la cifra, situándose en el año 2014 con 967 certificaciones.

Colombia
En el año 1999 se llevan a cabo 13 certificaciones en esta norma, y desde entonces comienza un discreto crecimiento, que despunta en el año 2012, llegando a alcanzar los 3.453 certificados emitidos en el año 2014.

México
Se registran 63 certificados emitidos en el año 1999. Se alcanzan las 492 certificaciones en el año 2004, disminuyen durante los años 2005 y 2006, y aumentan en el año 2007 llegando al año 2009 con 870 certificaciones. Vuelven a disminuir las certificaciones durante el año 2010 y 2011, y vuelve a aumentar la cifra en el año 2012 con un total de 1.096 certificaciones. Disminuye mínimamente en el año 2013, y se sitúa en el año 2014 con 1.452 certificados emitidos.

Perú
Inicia su emisión de certificados en esta norma con un total de 7 en el año 1999, y desde ese año arranca una lenta progresión que despega en el año 2010, alcanzando las 401 certificaciones emitidas. En el año 2011 se produce una disminución, con 248 certificaciones, y remonta su certificación situándose en el año 2014 con un total de 353 certificados emitidos.

Tomado de: https://www.isotools.org/