miércoles, 5 de septiembre de 2018

EL CASO DE ÉXITO QUE MUESTRA LOS BENEFICIOS DE TENER CLIENTES FELICES

Las redes sociales son un arma de doble filo para las marcas. Allí pueden posicionar su nombre y garantizar su éxito o, por el contrario, pueden encontrarse envueltas en polémicas por fallas en su servicio. 
En cualquiera de ambos casos, la información se propagará rápido y la suerte estará echada: quienes se hayan hecho con un buen nombre, alcanzarán el éxito; el resto afrontará panoramas cada vez más adversos.

Seguro te estarás preguntando ahora mismo cómo puedes lograr hacer parte del grupo de los exitosos. Desde luego, no es una tarea fácil. Pero un buen primer paso es reconocer buenas prácticas en las cuales las marcas aprovechan el poder del mundo digital para poner al público de su lado, como lo hizo el Hotel Ritz-Carlton.

La historia de la jirafa del Hotel Ritz-Carlton

Todo comenzó en marzo de 2012, cuando la esposa y los dos hijos de Chris Hurn regresaron de su estancia en el Hotel Ritz-Carlton de Amelia Island (Florida, Estados Unidos). Al volver, el menor de los niños se dio cuenta de que había perdido su juguete favorito: una jirafa de peluche llamada Joshie.

El señor Hurn calmó a su hijo con una mentira inocente: le dijo que Joshie no estaba en casa porque había decidido pasar unos días extra de vacaciones. Inmediatamente después, llamó al hotel y preguntó si la jirafa de peluche estaba allí, no sin antes darles detalles sobre la historia que le había contado a su hijo.

Los trabajadores del Ritz-Carlton se pusieron manos a la obra. Encontraron a Joshie y rápidamente se dieron a la tarea de documentar todo lo que la pequeña jirafa de peluche había hecho durante sus vacaciones.

Joshie disfrutó de la piscina…


Dio un paseo por la playa…

Tuvo tiempo de relajarse en el spa del hotel…


Pocos días más tarde, la familia Hurn recibió un paquete en su domicilio. Allí estaba Joshie con todas las fotos que recordaban sus días extra de vacaciones. La historia y las imágenes fueron compartidas a través de las redes sociales y el Ritz Carlton se hizo tendencia. Usuarios de todo el mundo destacaron la creatividad del hotel y su excelente atención.

¿Qué podemos aprender sobre servicio al cliente?

Este caso nos deja importantes lecciones sobre cómo debe ser el servicio al cliente en la era digital. Está claro que hoy, más que adquirir bienes o servicios, las personas valoran experiencias que los hagan sentir importantes antes, durante y después de la venta.

También es evidente que el servicio al cliente no es una pérdida de tiempo para tu empresa. Marcas como el Ritz saben que, hoy por hoy, mantener un cliente puede llegar a ser mucho más rentable que salir a buscar uno nuevo. Además, contar con clientes felices de tu lado es el primer paso hacia el éxito.

Es necesario para las empresas adoptar esta perspectiva cuanto antes. Sin embargo, ningún caso es igual a otro, e identificar las oportunidades no es algo que se aprenda de la noche a la mañana.

Tomado de: http://cursoscortos.eltiempo.com/

DIRECCIÓN POR OBJETIVOS. TAMBIÉN EN CENTROS EDUCATIVOS

La Dirección por objetivos es un estilo de dirección eficaz y motivador, ya que el directivo distribuye entre sus colaboradores no las tareas, sino los objetivos que hay que cumplir, dejando en sus manos la iniciativa en cuanto a los medios. 
Por tanto, dirigir por objetivos significa delegar decisiones y también señalar previamente los criterios según los cuales se van a juzgar los resultados.

Este nuevo enfoque de la función directiva centra su preocupación en el para qué del centro educativo, en la capacidad de integrar sus objetivos con un alto nivel de compromiso y aceptación por parte de los componentes de la comunidad educativa, manteniendo en función de esos objetivos la identidad del centro y propiciando la renovación continua del mismo en una constante adaptación de la institución al medio social en que vive. Para ello, obviamente, los objetivos del centro deben estar claramente definidos.

Tres aspectos, estrechamente relacionados, destacan en la dirección por objetivos: planificación participada, coparticipación y corresponsabilidad.

El personal del centro debe participar en la elaboración y planificación de los objetivos institucionales, así como llevar a cabo una participación conjuntamente con sus compañeros, teniendo en cuenta que para que otros puedan realizar las tareas que tienen encomendadas, primero otros deben realizar las suyas. Se crea una motivación a través del compañerismo.
Las funciones del director en este contexto son:
  • Concepción del centro global, considerado como un todo
  • Actitud motivadora, creativa y potenciadora de compromisos individuales
  • Determinación concreta, específica y compartida de los objetivos individuales
  • Planificación participativa de actividades
  • Asignación concreta de responsabilidades de cada uno en los resultados
  • Coordinación de las aportaciones de los sectores de la comunidad escolar
  • Renovación constante de las metas de la organización en base a los resultados
  • Mantener una estructura relacional
  • Dirección centrada en tareas de impulso, motivación, apoyo y comprensión
  • Aceptación de responsabilidades compartidas por todos
  • Alto grado de comprensión y aceptación de los objetivos
Los objetivos institucionales deben fijarse en las siguientes áreas:
  • Productividad de la organización: dónde se tiene en cuenta la evolución de los alumnos
  • Integración en la organización: desarrollo personal y profesional de los docentes, su participación en la toma de decisiones e innovación y cambio
  • Salud de la organización: buen funcionamiento de los recursos humanos y materiales con el entorno
  • Realimentación de la organización: teniendo en cuenta los resultados de objetivos de análisis de la situación y del proceso de rectificación.
En todo centro educativo que quiera seguir la metodología de la dirección por objetivos, se deben definir los mismos y realizar una planificación de cómo se llevará a cabo la consecución de dichos objetivos, siempre contando con la colaboración de toda la comunidad educativa (personal del centro en primer lugar, padres y alumnos en segundo).

Es muy importante que el personal del centro se sienta integrado en la consecución de los objetivos y actúe de forma conjunta con el resto de personas. Para ello, el director debe desempeñar su papel de coordinador de todo el proceso, ayudando y motivando en todo momento a sus colaboradores.

Para hacer más llevadera esta función, cuenta con una solución Balanced Scorecard o CMI, que permite al centro definir sus objetivos estratégicos, además de iniciativas, etapas y tareas derivadas de éstos. Y unos indicadores y metas, que permiten ver la evolución y consecución de los objetivos.

Tomado de: https://www.isotools.org