jueves, 30 de junio de 2022

SEGURIDAD INDUSTRIAL ¿CUÁLES SON LAS CAUSAS MÁS COMUNES QUE GENERAN ACCIDENTES?

En el artículo de hoy queremos exponer un manual sobre seguridad industrial. Dicho manual se ha establecido teniendo en cuenta la experiencia humana en el trabajo.

No existe justificación para un accidente que puede ser evitable, así como no existe excusa para que se repita cualquier accidente.

La invariable causa de los accidentes proviene de hacer lo que no se debería haber hecho o en omitir hacer algo que sí debería haberse hecho. La seguridad industrial es una actitud, que se deberá asumir y sustentar tanto en el comportamiento durante el trabajo, como en el hogar y la calle. Para la organización un accidente significa pérdidas, pero para el trabajador significa una posible incapacidad física. Es importante trabajar para eliminar los accidentes y suprimir las causas que los producen.

El motivo por el que se producen los accidentes

Aunque se presta mucha atención a la seguridad industrial, las tasas de accidentes aumentan todos los años es una proporción bastante importante.

La función que tienen los especialistas en seguridad, es la de examinar el problema de manera diaria, con el fin de obtener una respuesta adecuada. Las estadísticas prueban que, en la gran mayoría de los casos, los accidentes se encuentran causados por algún acto de descuido personal. Esto se aplica en el trabajo, el hogar y la vida diaria. Todas las personas llevan a cabo actos inseguros, sin prever los resultados que puedan acarrear. Cuando se repite con frecuencia, se transforma en un hábito y entonces, es solo cuestión de tiempo que sucedan accidentes. Se conocen algunas de los motivos por los que las personas llevan a cabo dichos actos. Es necesario que se observen las actitudes que provocan los accidentes.

El supervisor es la persona que se ocupará de informar, durante un período de entrenamiento, sobre su nuevo trabajo. Será el encargado de hacerle conocer todas las reglas que tiene la organización y las normas de seguridad. La calidad en el trabajo debe ser tan importante para usted como lo es para el supervisor. Deberá conocer el procedimiento que debe realizar para ejecutar su tarea de una forma segura. Cuando se generen dudas deberá preguntar a su supervisor, el cual es responsable de que el trabajo se realice de una forma correcta y segura. 

El mismo se encargará de evaluar los progresos durante las primeras semanas de entrenamiento y corregir cualquiera de los actos inseguros que usted pueda realizar, antes de se transformen en hábitos, tendientes de generar un accidente previsible. Por este motivo, no se incomode cuando su supervisor le corrija por llevar a cabo un acto inseguro, ya que siempre existe una razón importante para ello. Las normas de seguridad y los procedimientos se encuentran basados en años de experiencia. 

En una gran cantidad de ocasiones los accidentes laborales se producen por descuidos. 

Omisión de las instrucciones

Hay empleados que tienden a eliminar ciertas operaciones del proceso, lo que puede producir graves resultados. En todas las organizaciones, con una mínima gestión de calidad, las tareas son usualmente racionalizadas. Esto es lo que permite que el tiempo de realización, en cada una de ella sea el mínimo. Por esto, las reglas de seguridad y los métodos de trabajo, no son simples ocurrencias y tienen razones muy importantes para existir. De allí que sea totalmente absurdo pretender minimizar el tiempo estipulado para cada tarea, eliminando operaciones, o no haciéndolas de la forma indicada sin realizar una consulta previa. Esto supone violar una regla de seguridad industrial.

Mal uso de los equipos

Es muy importante utilizar las herramientas y los equipos adecuados para la ejecución de cada tarea. Las herramientas rotas o muy gastadas deben ser reparadas o cambiadas por otras nuevas. Utilizar una herramienta equivocada o desgastada puede generar un accidente en los trabajadores.
Automatismo y falta de atención

El automatismo es una actitud “mental”, en la que el trabajador “adormece” su razonamiento. Desde el momento en el que se llega a la automatización en el trabajo, y los movimientos adquieren un sentido ritual, la actitud llega a constituirse en una fuente de riesgo. Cuando los movimientos son casi mecánicos, el trabajador generalmente se ocupa de pensamiento personales, ajenos a la operación que está realizando. En ese momento, la seguridad depende de lo bien que se haya adaptado a su ritmo de trabajo y a la operación que ejecuta. Para un empleado automatizado, una fracción de segundo es la diferentes entre la seguridad y el peligro.

La fatiga

La fatiga puede estar causada en un trabajador, por distintos motivos: tener dos ocupaciones, realizar un exceso de horas extras, encontrarse sobrecargado de tareas en su casa, estar mal alimentado, descansar poco, problemas económicos, etc. son algunos de los casos que generan fatiga en la actualidad. La acción directa de la fatiga se ve reflejada en una coordinación deficiente de los movimientos, en una lentitud del pensamiento y los actos reflejos. Es decir, que como fuente de peligro se explica por sí misma.

Estado emocional

Es una de las causas más importantes por las que una persona pierde su concentración en el trabajo. Un trabajador preocupado es un peligro para sí mismo y para los compañeros que se encuentran alrededor suyo.

La indiferencia

El trabajador indiferente no apoya ni niega la seguridad industrial, sino que simplemente no la tiene en cuenta. Nunca encuentra el tiempo necesario para mostrar la necesidad de mantener un programa de seguridad. Su actitud es que lo demás realicen el esfuerzo. Raramente se interesan por los asuntos comunitarios. La seguridad en sus hogares en totalmente desconocida. La seguridad implica responsabilidad.

La imprudencia

La imprudencia es una experiencia inexcusable. Un trabajador que trata sus herramientas, sus máquinas o equipos de forma descuidad, tarde o temprano generará un accidente. 

Cuando los útiles terminan por inutilizarse o romperse, la persona que se ha comportado de manera imprudente, es muy frecuente que no sufra las consecuencias de forma directa. Quien las sufre es el compañero del siguiente turno. Cuando el trabajador ha conseguido un alto grado de calidad en su labor, sabe que nunca se conoce el estado de las herramientas y el equipo, a menos que se las inspeccione previamente.

Tomado de: https://www.isotools.org/

IMPLEMENTAR LA ADOPCIÓN DE UN ENFOQUE BASADO EN PROCESOS

La adopción de un enfoque basado en procesos, requiere de un gran esfuerzo por parte de todos los miembros de la empresa, en especial de los líderes y altos cargos, que serán los máximos responsables y quienes deben motivar al resto de la compañía.
 
Sin su complicidad este modelo de gestión no alcanzará nunca los resultados deseados.

Sin embargo, una de las grandes ventajas que ofrece este sistema de gestión por procesos, es que se puede implementar de manera gradual. Se puede empezar por determinados procesos o proyectos que sirvan de punto de partida para extenderlo a toda la organización de manera gradual. Este proceso gradual de cambio, permite observar las ventajas del enfoque basado en procesos y conlleva un menor esfuerzo inicial.

Con independencia del tipo de implementación que se lleve a cabo, para que la aplicación de este enfoque se realice de manera eficiente las empresas precisan de una hoja de ruta
que les oriente a lo largo de este camino.

La adopción de este enfoque debe comprender las siguientes fases:

1. Identificar y secuenciar cada uno de los procesos.

El primer paso que toda empresa debe emprender para adoptar este sistema de gestión
por procesos, es identificar los procesos más significativos que deben formar parte de su
estructura.

En las organizaciones existen diferentes tipos de procesos, de carácter estratégico, operativo o de apoyo, que siempre han existido. El objetivo de esta etapa es identificar cada uno de estos procesos, reflexionar sobre su nivel de repercusión y seleccionar aquellos que sean realmente significativos y aporten valor a la empresa.

La selección de estos procesos no puede ser al azar. Se debe tener presente una serie de factores como la satisfacción del cliente, la repercusión del proceso en la calidad del servicio o producto, el cumplimiento de los requisitos legales o los posibles riesgos vinculados a cada proceso.

Una vez se han identificado aquellos procesos que añaden valor al producto o servicio, el siguiente paso será secuenciar los procesos, de tal forma que se pueda observar con claridad los elementos de entrada y salida de cada proceso y la interacción entre ellos.

La mejor manera de visualizar toda esta información es a través de una representación gráfica, un Mapa de procesos, a través del que se reflejan los procesos que constituyen el sistema de gestión y las interacciones existentes entre las actividades y procesos.

La empresa será quien determine la manera en que se estructure y presenten los procesos dentro del mapa. Así como quien decida en qué medida se detallará la información que aquí se exprese. El objetivo de este mapa es conocer y entender los procesos que se llevan a cabo, por eso es importante detallar los procesos más relevantes. Sin embargo, hay que tener presente que un exceso de información puede dificultar esta compresión.

A fin de garantizar la correcta implementación, mantenimiento y mejora de los procesos, la dirección deberá asignar un responsable para cada proceso y definir el papel que tendrá cada persona, de manera individual en el mismo. También es preciso que determine los recursos necesarios para cada una de las actividades que componen los procesos.

2. Describir y documentar los procesos.

La mejora continua de los procesos sólo es posible si se conoce cómo se desarrollan las actividades que componen los procesos, si se entiende el procedimiento por el que las entradas se transforman en salida.

Con el fin de comprender mejor estos procesos, es preciso describir los diferentes procesos y documentar toda esta información, detallando las actividades que lo conforman y sus características principales. De esta forma se facilita, además, su gestión y futura mejora.

La información recogida se puede plasmar de manera escrita o gráfica, a través de diagramas de flujo, que permiten observar las relaciones existentes, y por medio de fichas de procesos, donde se detalla información necesaria para el control de los procesos.

En estas fichas de procesos se debe incluir información relativa al objetivo del proceso, la persona responsable, su alcance, las entradas y salidas y los recursos necesarios, además de establecer los indicadores que se van a utilizar para su seguimiento y control, las variables que se tendrán presente y señalar las inspecciones que se llevarán a cabo.

3. Seguir y medir los procesos y los resultados obtenidos.

Este paso es fundamental para la mejora continua de los procesos. Una vez descritos los procesos que se van a llevar a cabo y determinados los indicadores de control, es necesario realizar un seguimiento y control continuo. A través del control y medición de los indicadores, es posible conocer los resultados obtenidos y verificar su eficacia y eficiencia.

Gracias al seguimiento y control de estos procesos, es posible obtener información relevante que permita determinar posibles mejoras en el proceso, como la optimización de los recursos o la supresión de tareas innecesarias y facilite la toma de decisiones.

4. Mejorar los procesos de manera continua.

En la fase anterior se analizaban y valoraban los procesos y sus resultados, con el fin de comprobar su eficacia. Una vez comprobados los resultados, el personal encargado debe valorar, en base a la información obtenida, si se han alcanzado los resultados esperados y si es posible o no mejorar esos resultados.

Siempre que los resultados obtenidos no sean los esperados, las entidades deberán esforzarse por diseñar y establecer las medidas oportunas para corregir el proceso y conseguir sus propósitos.

Sin embargo, aunque los resultados alcanzados sean los planificados, las entidades deberán analizar si es posible para mejorar ese proceso y determinar la forma, para aumentar la eficacia del mismo, con el fin de alcanzar la Excelencia Empresarial.

Tomado de: https://www.isotools.org/