Las “Smart Cities” o Ciudades Inteligentes y las Normas o Sistemas de Gestión se convierten en compañeros de viaje inseparables en el camino de la innovación y la gestión eficaz.
El concepto “Smart City” está cobrando cada vez mayor relevancia, marcando el futuro de las urbes y su camino en la innovación y búsqueda para mejorar la calidad de vida de sus habitantes y aportar soluciones a las necesidades de su día a día.
Sin embargo, no podemos olvidar que detrás de las “Smart Cities” o Ciudades Inteligentes también se encuentran numerosas normas que, como la ISO 37120, UNE 178501 o UNE 178101, aportan su granito de arena en aspectos muy concretos.
En este artículo voy a exponer brevemente la importancia de las ciudades, el concepto de “Smart City” y su origen, así como alguna de las numerosas normas existentes y su relevancia para todas aquellas ciudades englobadas o que quieren formar parte de las llamadas ciudades inteligentes.
Breve visión de la importancia de la ciudad
Las ciudades se han caracterizado siempre por ser cunas de innovación tecnológica, reformas sociales, fuentes de expansión económica y desarrollo cultural. Es decir, se asientan y definen por ser fuertes y poderosos intercambiadores de ideas y de colaboración que hacen que se innove de forma constante.
En esta realidad, la tecnología ha ocupado un papel protagonista propiciando una transformación de gran calado que busca aportar soluciones a los problemas urbanos, proporcionar una mejor calidad de vida de los habitantes de la urbe e innovar en nuevos campos de actuación que marcarán el futuro.
Si nos fijamos en los números la importancia de la ciudad a nivel demográfico también es relevante. Y es que las urbes ocupan el 2% de la masa terrestre pero, por contrapartida, cuentan con el 51% de la población. Tendencia que se incrementará si sigue la evolución actual, llegando en el año 2050 al 80% de urbanitas.
Teniendo estas breves pinceladas en mente, la importancia de las ciudades es palpable. Ciudades, cada vez más marcadas por la transformación de la gestión, operativa y diseño, que tienen como finalidad ser más eficaces, eficientes e inteligentes. Lo que podríamos incluir de una forma muy global en el concepto de “Smart Cities”.
El concepto de “Smart City” y su origen.
A día de hoy, todos hemos oído mencionar en más de una ocasión el término “Smart City” o Ciudad Inteligente en su versión en español, sin embargo comprender lo que significa y caracteriza este concepto es clave si queremos pasar de un mero reconocimiento a un conocimiento completo.
De forma general, podríamos colocar el origen de las Ciudades Inteligentes en los años 40 del pasado siglo con la aparición y desarrollo de los controles de sistemas organizados mediante la utilización de sensores y dispositivos que estaban capacitados para realizar cambios en la operativa de los mismos.
De esa primera experiencia, la historia u origen de las “Smart Cities” está marcada por altibajos hasta que, entrado el siglo XXI, apareció el concepto de Ciudad Inteligente como un proyecto de futuro para las ciudades creado por la empresa IBM, a la que después se le han ido uniendo otras empresas como la estadounidense Cisco.
Si nos adentramos en la definición del concepto “Smart City” también podemos ver una clara evolución desde un primer concepto centrado en la eficiencia energética, impacto ambiental y cambio climático, a una visión más amplia en la que se han incorporado nuevos objetivos centrados en aumentar la competitividad económica, mejorar la calidad de vida, desarrollar nuevos modelos administrativos, tener presente la seguridad ciudadana y aplicar los avances tecnológicos como una parte activa del mismo.
De esta forma, podemos tomar como referencia la definición aportada por AENOR que nos indica que una “ciudad inteligente es la visión holística de una ciudad que aplica las TIC para la mejora de la calidad de vida y la accesibilidad de sus habitantes, y asegura un desarrollo sostenible económico, social y ambiental en mejora permanente”.
Smart City y Normas ISO-UNE: compañeros de viaje.
No podemos pensar en las “Smart Cities” sin tener presente a su compañero inseparable de viaje: las normas o sistemas de gestión.
Estas, aunque menos visibles y no tan llamativas, ocupan un lugar relevante al aportar, en muchos de los casos, una guía o un marco de actuación para los distintos campos que se encuentran englobados dentro del términos de Ciudad Inteligente como, por ejemplo, redes de servicios públicos, redes de telecomunicaciones, electricidad, redes de agua, open data, redes de acceso y transporte, etc.
Algunas de estas normas, como la UNE-ISO 37120:2015, Desarrollo sostenible en las ciudades. Indicadores para los servicios urbanos y la calidad de vida, “define y establece metodologías para un conjunto de indicadores que guíen y midan el desempeño de los servicios urbanos y la calidad de vida”. Al fin y al cabo, tenemos que tener presente que la base de la “Smart City” se basa en contar con datos relevantes en puntos clave, aportados por los distintos indicadores, que se basan en sensores en muchos de los casos, y que permiten evaluar el grado de cumplimiento de los objetivos marcados, las tendencias y evolución.
Por otro lado, podemos destacar la Norma UNE 178501:2016, Sistema de gestión de los destinos turísticos inteligentes, de reciente publicación, que “especifica los requisitos para establecer, implementar, mantener y mejorar un sistema de gestión de un Destino Turístico Inteligente que considere adecuadamente la innovación, el uso de tecnologías, la accesibilidad universal y la sostenibilidad de dichos sistema”.
Y, por último, una Norma nacida en el seno, al igual que la anterior, del comité AEN/CTN 178, centrada en la gestión eficaz del agua: la Norma UNE 178101-1:2015.
Esta norma se encuentra incluida en la serie UNE 178101 que tiene como objetivo marcar las pautas para “definir métricas aplicables a las redes de los servicios públicos: agua, residuos, energía (electricidad y gas), telecomunicaciones y transporte, para facilitar los mejores servicios a los ciudadanos, a la vez que procurar la máxima eficiencia y una fácil integración en el entorno”. Todos ellos aspectos clave, cuya gestión eficaz de dichos recursos y tratamiento adecuado de los desperdicios es esencial y se encuentra en la base de todas aquellas urbes que deseen englobarse dentro del término “Smart Cities”.
En este artículo apenas hemos arañado la importancia de la “Smart City” para el futuro y de cómo está cambiando y cambiará el escenario de las urbes en los años venideros, todo ello de la mano de las distintas normas o sistemas de gestión ya publicadas así como todas aquellas que están en proceso y dentro de poco verán la luz.
En próximos artículos, seguiremos replicando a SBQ Consultores en temas más concretos como movilidad, tecnología o sostenibilidad enmarcados en las “Smart Cities”, por lo que, si todavía no estás suscrito al blog te recomiendo que lo hagas para no perderte ninguna novedad.
Tomado de: http://www.sbqconsultores.es/smart-city-normas-claves-futuro/