Lo primero que debemos saber es que es contaminación acústica. Son los sonidos indeseados que representan un estorbo púbico generalizado. Puede considerarse que es más que un estorbo.
El ruido es un peligro para la salud de las personas. La contaminación acústica puede generar enfermedades tanto físicas como psicológicas.
Ninguna persona es inmune al ruido, aunque aparentemente nos adaptemos, la verdad es que el oído siempre lo escucha, y el cuerpo reacciona de forma involuntaria. Se puede producir una extrema tensión en la persona que se encuentre sometida a contaminación acústica.
La contaminación acústica se encuentra provocada por el ruido, siendo un sonido desagradable que ha ido aumentado con el desarrollo de la humanidad, la industria en general y la urbanización. Este es uno de los contaminantes del medio ambiente que presenta mayor problema para la salud, ya sea de humanos como de animales.
Efectos que genera el ruido la contaminación acústica
Los principales daños que se generan por la exposición al ruido son: la interferencia en la comunicación, la pérdida de la audición, la perturbación del sueño y el estrés.
El ruido puede provocar dificultades para conciliar el sueño. Se han realizado algunos estudios en los que se ha llegado a la conclusión de que la perturbación del sueño se manifiesta cada vez más a medida que los niveles de contaminación acústica sobrepasan los límites de serenidad.
El ruido nos puede afectar durante toda nuestra vida. Se han encontrado indicios de perjuicio al feto durante el embarazo en madres que han estado expuestas a ruidos industriales u otros ruidos excesivos. En la infancia y la juventud, los niveles altos de ruido pueden hacer que experimenten dificultad en aprender, o mala salud. Y en personas de edad avanzada se suelen presentar dificultades a la hora de conciliar el sueño y descansar.
El ruido también produce alteraciones en la conducta, que suelen producirse de forma momentánea, las cuales pueden ser agresividad, aumento de la irritabilidad o el desinterés.
El ruido es un peligro para la salud de las personas. La Contaminación Acústica puede generar enfermedades tanto físicas como psicológicas.
Fuentes de la contaminación acústica
El tráfico: en las ciudades el ruido de los vehículos es producido principalmente por el motor y la ficción que genera el vehículo con el suelo y el aire.
Aparatos de radio y televisión: el nivel de ruido de estos aparatos depende del tipo de programa que se escuche o se vea. Además, el volumen del televisor o de la radio pueden generar una potencia sonora de 100 a 100 dB.
Instalaciones eléctricas: los sistemas de iluminación con sus respectivos interruptores, relés de conmutación, etc. son una de las principales fuentes de ruido, ya que se pueden alcanzar niveles de presión acústicos molestos, ya que emiten de una forma continua frecuencias discretas que se amplifican con los objetos de montaje y mantenimiento.
Construcción de edificios y obras públicas: la construcción es uno de los principales sectores que generan contaminación acústica, ya que produce emisiones de muy altos decibelios. Existen una serie de sonidos que se encuentran provocados por las grúas, mezcladoras de cemento, perforación, etc.
Comercio: las actividades comerciales son una fuente importante de contaminación acústica, y además va aumentando cada día más.
Posibles soluciones a la contaminación acústica que se genera en el día a día
Todos podemos conseguir un ambiente sin tantos ruidos si ponemos un poco de nuestra parte cada uno y nos concienciamos con el problema. Si adoptamos medidas, tan fáciles como las siguientes, contribuiremos a un ambiente mucho más limpio de ruido:
- En los hogares: las operaciones ruidosas que se llevan a cabo en el interior de los hogares, como puede ser hacer un agujero en la pared, pasar la aspiradora, etc. no debería producir un ruido excesivo y, en cualquier caso, deberían realizarse a unas horas en la que generen las menores molestias posibles a los vecinos. También se debe producir que los equipos de música y televisores se encuentren a un nivel de volumen moderado. Adquirir, en la medida de lo posible, electrodomésticos más silenciosos que contribuyen a mejorar la calidad de vida en el día a día.
- Durante la conducción: es necesario que se procure que nuestro vehículo no provoque ruidos que excedan lo permitido por la ley, no utilizar la bocina en las ciudades (salvo en situaciones que puedan entrañar alguna emergencia), acelerar de forma gradual, respetar el límite de velocidad, mantener el vehículo con las revisiones necesarias, etc.
- Al comprar una casa: se aconseja que se opte por un emplazamiento poco ruidoso, lo más lejano a las vías de tráfico intenso, de locales públicos ruidoso o de centros comerciales.
Es muy importante denunciar ante las autoridades públicas cualquier fuente injustificada de ruido, ya que nos encontramos amparados por la legislación que protege al ciudadano frente a este tipo de contaminación.
Existen reglamentos que regulan o incluso prohíben determinadas actividades generadoras de ruido, pero no siempre se aplican. Es muy importante que ejerzamos nuestro derecho al silencio para que desaparezca, en la medida de lo posible, la contaminación acústica.
La contaminación acústica en entornos laborales
Trabajar en entornos en los que hay contaminación acústica es más frecuente de lo que se cree. Los contextos laborales relacionados con la industria y la construcción son algunos de los más afectados por este fenómeno.
Los responsables de salud en el trabajo deberán de contar con herramientas que les permitan parametrizar, medir y controlar este tipo de amenazas cada vez más perjudiciales para los trabajadores, con el objetivo de poder tomar medidas preventivas que contribuyan a mejorar su salud.
Tomado de: https://www.isotools.org