El pasado 19 de junio se publicó la nueva norma ISO 22000 2018 Sistemas de Gestión de la Inocuidad de los Alimentos, por parte de la Organización Internacional de Normalización (ISO).
Una versión que anula a la versión anterior de la norma. A partir de esa fecha, las organizaciones tienen un plazo de tres años para adaptarse.
La norma ISO 22000 2018 tiene el propósito de asegurar la protección de consumidor y fortalecer su confianza. Y, para ello establece los elementos claves que se deben seguir en el sistema de gestión de seguridad alimentaria, buscando incrementar el rendimiento en la cadena de suministro.
Es por ello que, este tipo de normativa debe estar en constante reciclaje, buscando en todo momento adaptase al contexto actual y buscar la mayor calidad de los alimentos. Así como reducir riesgos en la cadena alimentaria.
Principales cambios en la nueva versión de la norma ISO 22000 2018
Son diferentes los cambios que ha sufrido la norma, entre los que podemos destacar:
- Nuevo enfoque en la gestión del riesgo: que se orienta hacia la minimización de los riesgos en toda la cadena alimentaria. De esta forma se busca identificar, prevenir y reducir los riesgos, y con conseguir organizaciones más eficaces y competitivas.
- Análisis de riesgos: en este punto cabe destacar que se incluye el riesgo empresarial según el enfoque de las nuevas normas ISO 9001 e ISO 14001, al actual riesgo operativo gestionado mediante el Análisis de peligros y puntos de control críticos.
- Estructura de alto nivel: la norma se adapta al objetivo de cumplir la estructura de alto nivel, común en las diferentes normas ISO.
- Estrecha vinculación con Codex Alimentarius, que comprende una colección de estándares, códigos de prácticas y guías internacionalmente reconocidos en el ámbito de los alimentos, su producción y la seguridad alimentaria. La comisión de Codex Alimentarius forma un cuerpo conjunto a la Food an Agriculture Organization (FAO), organismo perteneciente a las Naciones Unidas y a la Organización Mundial de la Salud (OMS).
- Identifica el ciclo PHVA (Planificar, Hacer, Verificar y Actuar): se aclara que existen dos ciclos PHVA trabajando de forma conjunta, uno es más general por lo que abarca el sistema de Gestión de Inocuidad Alimentaria y dentro del mismo, otros específicos que cubre los principios del Sistema APPCC.
- Ofrece una mejor descripción de los términos, puntos críticos de control, programa de prerrequisitos operativos y programa de prerrequisitos.
De esta forma, la nueva estructura incluye estos epígrafes:
- Contexto de la organización
- Liderazgo
- Planificación
- Apoyo
- Operación
- Evaluación del desempeño
- Mejora continua
El 19 de junio se publicó la nueva norma ISO 22000:2018 Sistema de Gestión Inocuidad Alimentaria
Aclaración de conceptos: esta nueva versión cuenta con una aclaración sobre los conceptos que aparecen en la normativa.
La norma ISO 22000 2018 se renueva después de trece años de consenso internacional. La nueva ISO 22000 2018, quiere adaptarse al escenario actual en el que la complejidad en la cadena alimentaria, la introducción de nuevos alimentos, la preocupación por la transparencia, traen consigo riesgos de fraude y restos para la seguridad alimentaria.
En la nueva ISO 22000 2018 se mantiene y refuerza los elementos claves para garantizar la seguridad alimentaria como: responsabilidad de la dirección, comunicación interactiva a lo largo de toda la cadena, programa de prerrequisitos y sistemas APPCC (Análisis de Peligros y Puntos Críticos de Control).
Todas las novedades suponen nuevos retos y oportunidades para las más de 30.000 empresas que se encuentran certificadas a nivel internacional frente a la norma ISO 22000. Estas empresas disponen de un periodo de tres años, hasta junio de 2021, para llevar a cabo la transición con el objetivo de adaptar y certificar su sistema de gestión frente a esta nueva versión de la norma ISO 22000.
La norma ISO 22000 2018 tiene la misión de satisfacer la demanda del mercado y del cliente final, respecto al cumplimiento de criterios de higiene y seguridad a alimentaria. Y demuestra el cumplimiento de los requisitos normativos voluntarios para cualquier empresa de la cadena alimentaria a nivel mundial.
La norma se dirige a todos los eslabones de la cadena alimentaria hasta el consumidor final, de la granja a la mesa, productores de alimentación animal, productores primarios, transformadores o procesadores de alimentos, transportistas y otros operadores logísticos, empresas de catering y restauración alimentarias, y empresas de venta al por menor y a tiendas de distribución de servicios de comidas.
Además, contempla la certificación de empresas que se encuentran relacionadas con la cadena alimentaria, es decir, productores de equipos, material de envase y embalaje, agentes de limpieza y aditivos.
Tomado de: https://www.nueva-iso-9001-2015.com