La última revisión de la norma ISO 9001 fue publicada en septiembre de 2015. Tiene un periodo de adaptación de tres años.
Es decir da margen a las organizaciones a realizar la transición ISO 9001 de la versión 2008 a la de 2015 de manera paulatina.
Cierto es, que ese margen para realizar la transición puede ser visto como un respiro de tiempo para los gestores de calidad de las organizaciones. Sin embargo, también es cierto que los cambios que incluye la revisión suponen relevantes mejoras para las organizacionesy la comunidad de negocios en general.
Por lo tanto, ante este escenario, cabe preguntarse ¿Qué razón hay entonces para esperar tres años para implementar todos estos cambios que incorpora la norma?
Beneficios de una temprana transición ISO 9001
A continuación, vamos ver algunos de los beneficios que tiene no esperar los tres años de límite para llevar a cabo la transición ISO 9001 2008 a la ISO 9001:2015.
1.Por la eficacia de los cambios que supone para el negocio: Dos de los cambios más relevantes de la revisión de la norma ISO 9001 han sido en relación al “contexto de la organización” y al “liderazgo”. En este sentido, vemos cómo una mejora en el rendimiento de la organización, así como en la capacidad estratégica general de la misma para alinear el SGC con los objetivos del negocio permite el logro de mejores resultados. A su vez, otro cambio importante de la revisión de la norma ISO 9001, es el “pensamiento basado en el riesgo”.Concretamente, este cambio lo que pretende es inculcar a los líderes de toda organización que traten de identificar, tratar y eliminar los riesgos y detectar oportunidades. Todo esto son acciones positivas y de mejora continua.
Entonces , ¿por qué esperar tres años para implantarlas, cuando podemos mejorar desde ya?
2. Por el incremento de coste y probabilidad de error que supone no hacerla: Mantener un Sistema de Gestión de la Calidad a caballo entre dos normas puede no sólo ser costoso, sino también proporciona mayor margen para el error.
3.Por la mejora de la reputación del negocio: Una pronta aplicación muestra la diligencia en la forma en la que llevamos nuestro negocio, muestra una actitud proactiva, y esto puede ayudar a crear una ventaja competitiva frente a proveedores, clientes y competidores.
4. Por la integración de sistemas: Las modificaciones introducidas tanto en la norma ISO 9001 como en la ISO 14001 en 2015 permiten implementar los cambios de manera integrada a través de su Sistema de Gestión de la Calidad y su Sistema de Gestión Ambiental, dando lugar a reducción de costes y agilidad del proceso.
Conclusión
En resumen, todos los anteriores beneficios que supone la rápida transición ISO 9001 en su versión 2008 a la versión de 2015 se traducen en una reducción de costes para las organizaciones, ya que:
- Por un lado, hemos visto que ayuda a lograr un mayor crecimiento empresarial puesto que permite mejorar el rendimiento y contribuye a identificar mejor las oportunidades.
- Por otro lado, otorga estabilidad a las organizaciones, al contribuir a identificar, eliminar y mitigar los riesgos.
- Además, en tercer lugar, el simple hecho de no tener que mantener un SGC entre dos normas, favorece el ahorro de trabajo y dinero.
Todo lo anterior supone importantes reducciones de costes para las organizaciones que optan por la pronta transición ISO 9001.
Como hemos desgranado, una rápida aplicación de los cambios introducidos en la nueva versión de 2015 de la norma ISO 9001 es bastante aconsejable para las organizaciones.
Tomado de: https://www.escuelaeuropeaexcelencia.com