Implementar una Norma ISO, no obliga a solicitar la certificación, si no que puede simplemente cumplir con parte de los requisitos de esta a modo de mejoramiento interno.
Certificarse cuesta tiempo y dinero
Si una organización decide que es el momento de solicitar la certificación, debe considerar la madurez del Sistema de gestión implementado y el tiempo y dinero que ese camino va a costar.
Igualmente, estudiar la necesidad de obtener la certificación es imprescindible, para que no resulte en una pérdida económica y de inversión de tiempo por parte de los responsables.
Además, una vez obtenida la certificación, la preocupación será mantenerla en el tiempo, hasta que, pasados tres años, se revise y verifiquen la continuidad.
Obligatoriedad del diseño de una estrategia
Ya no es la obligatoriedad, sino la necesidad de que la estrategia y los objetivos del Sistema de Gestión estén alineados, de manera que este funcione correctamente y sea efectivo.
En la estrategia se concretan hasta los más mínimos detalles de actuación del Sistema de Gestión frente a cualquier cambio, incidencia, mejora, etc.
La estrategia va a ser característica de cada empresa, y más compleja cuanto mayor es la organización.
Revisiones de las Normas ISO
Cada cierto tiempo y de manera regular, las Normas ISO son revisadas, con objeto de optimizarlas y mejorarlas.
Esto ocurre cuando la Comisión ISO lo decide, y entonces se pone en marcha la revisión de la norma y, transcurrido un tiempo prudencial es publicada.
Pasos para conseguir la Certificación en las Normas ISO
Recopilar información
Esta fase es la más importante de todas, ya que de ella dependerán las demás. A este respecto, es preciso disponer de la norma, la cual puede adquirirse comprándola a través de los organismos oficiales (como ISO o UNE).
No obstante, a no ser que se disponga de personal especializado, lo más usual es acudir a una consultora que de apoyo.
Contacto con el organismo de certificación
En este punto, el organismo de certificación debe considerar si la empresa está preparada para proceder con el proceso de certificación.
Si la considera apta, elabora una oferta, cuyos detalles variarán en función de la complejidad y tamaño de la empresa, ya que de ello dependerá el tiempo a emplear.
Consultor
La elección de consultor, que es la persona que no solo asesora sino que además orienta el desarrollo del proyecto 'in situ', es un asunto clave y determinante dentro del mismo. Por eso, es deseable que dicho personaje evidencie su experiencia y conocimiento en el manejo de estos procesos y gestiones y que también domine las (s) norma (s) a certificar.
Mediciones de referencia
Cuando la empresa acepta la oferta, se procede con las mediciones de cero o referencia. Es así como valoran el grado de cumplimiento con los requisitos de la norma y en qué aspectos debe mejorar.
Desarrollo de la estrategia
Si se detectan debilidades, significa que la estrategia debe mejorarse, para lo cual, en muchas ocasiones es necesario el apoyo de una consultora.
Elegir un Software de gestión (opcional)
La carga de trabajo y el desarrollo documental es muy amplio, por lo que recurrir a un software puede ser la opción más adecuada.
En este sentido, hay que tener precaución, e investigar las diferentes opciones en base a la norma o Normas ISO que se hayan implementado.
Inspección
Una vez mejorada la estrategia y aplicadas las correcciones presentadas por el organismo de certificación, se realiza una segunda inspección. Si entonces se valora como apta, la empresa obtiene el certificado.
Seguimiento anual
El Sistema de Gestión siempre está sujeto a mejoras, por lo que se realizan controles o seguimiento anuales para evaluar su desempeño y renovar la certificación.
En caso de detectar no conformidades, se le ofrece darles solución en un periodo de tiempo determinado, que dependerá de la gravedad de la misma.