domingo, 18 de mayo de 2025

CÓMO DESCRIBIR UN PROBLEMA PARA QUE TODOS ENTIENDAN

Para describir un problema, necesitas dar una descripción concisa de los hechos que deben abordarse. Además, responde a las cinco preguntas clave del método 5W2H: Quién, Dónde, Qué, Cuándo y Por qué.

Fíjate que el “Cómo” (la H del método) no se incluye en esta etapa. Eso es porque esta pregunta se responde más adelante, cuando se investiga la causa raíz del problema. Una vez que conoces los hechos relacionados, el análisis y la resolución pueden hacerse de forma más rápida y con menos costes.

Resolver problemas es algo habitual en cualquier empresa. En áreas como Calidad, este tipo de situaciones se trata con especial cuidado, aplicando métodos para identificar la causa raíz y definir acciones correctivas. Sin embargo, muchas veces no se le da la importancia que merece a un paso clave del proceso: redactar una buena descripción del problema.

Una descripción bien hecha aclara mucho mejor la situación, identificando su gravedad, localización e impacto económico. También es una herramienta de comunicación muy útil, ya que ayuda a conseguir apoyo y compromiso por parte de otras personas. Cuando los problemas están bien descritos, los demás entienden claramente qué estás intentando resolver.

¿Qué dificultad hay en describir un problema?

La dificultad de describir un problema es que muchos asumen que todo el mundo sabe cuál es el reto al que hay que enfrentarse. En estos casos, inevitablemente, se produce una descripción mal elaborada o incluso incorrecta del problema.

Cuando se asume que el motivo de un problema ya se conoce, se obtiene una de estas dos versiones posibles de la descripción del problema:

  • En un caso, la descripción del problema es extremadamente escasa en información y detalles, como: “Nuestro departamento ha estado recibiendo quejas de los clientes”.
  • En el otro extremo, esto puede conducir a una descripción detallada pero completamente incorrecta del problema o a una que ya apunta a identificar la solución. Por ejemplo: “Necesitamos volver a capacitar a los empleados porque están tardando demasiado en realizar sus tareas, lo que hace que los clientes se quejen de la lentitud de nuestro departamento”.

Como se puede ver, ambas descripciones de problemas son inadecuadas para invertir recursos valiosos en resolverlos.

Estas son algunos dos métodos que puede usar para identificar y describir un problema:

5W2H

Herramienta de gestión que organiza la descripción de un problema o plan de acción en siete preguntas clave: “¿Qué?”, “¿Por qué?”, “¿Dónde?”, “¿Cuándo?”, “¿Quién?”, “¿Cómo?” y “¿Cuánto?”.

Al responder cada una de forma sistemática, consigues comunicar el problema o el plan con claridad, amplitud y objetividad.

Causa raíz

Es el factor principal que, si se elimina, evita que el problema vuelva a repetirse, en lugar de simplemente tratar los síntomas.

Para identificarla, se suelen usar técnicas como los “porqués” encadenados o el análisis de fallos en cascada.

Diagrama de Ishikawa (espina de pescado)

Gráfico con forma de espina de pescado que agrupa visualmente las posibles causas de un problema en categorías como Método, Máquina, Material, Mano de obra, Medio ambiente y Medición.

Es muy útil para hacer lluvias de ideas estructuradas y ayuda al equipo a ver conexiones y decidir qué hipótesis investigar primero.

Análisis de Pareto

Método basado en el principio de que el 80% de los efectos provienen del 20% de las causas. Sirve para ordenar los fallos según su impacto.

Al centrarte en los pocos factores más relevantes, puedes ahorrar tiempo y recursos al resolver problemas.

PDCA (PHVA)

Ciclo de mejora continua con cuatro fases: Planificar (Plan), Hacer (Do), Verificar (Check) y Actuar (Act).

Consiste en aplicar pequeños cambios de forma iterativa, evaluar los resultados y ajustar procesos hasta alcanzar el rendimiento deseado.

CAPA (Acción Correctiva y Preventiva)

Conjunto de acciones para corregir no conformidades detectadas (acción correctiva) y evitar que vuelvan a ocurrir (acción preventiva).

Es clave en sistemas de gestión de calidad y cumplimiento normativo, asegurando que se aprendan lecciones de los errores.

Sigue leyendo – No conformidades y CAPA: cómo garantizar la calidad y seguridad en la industria farmacéutica

Matriz de causa y efecto

Herramienta usada en metodologías como Six Sigma para relacionar causas (variables de entrada, llamadas “X”) con efectos (resultados o problemas, llamados “Y”). Asigna pesos numéricos a cada relación para priorizar las variables con mayor impacto.

Al cuantificar estas relaciones, la matriz permite enfocar el análisis en las causas más críticas. A diferencia de herramientas como 5W2H o Ishikawa, su objetivo es establecer vínculos estadísticos y jerárquicos entre los factores del proceso y los resultados no deseados, evitando suposiciones subjetivas.

Entrevistas estructuradas

Técnica para recopilar información mediante preguntas predefinidas a personas clave o expertas, con el fin de entender mejor el contexto del problema.

Asegura coherencia en los datos recogidos y permite obtener evidencias claras sobre quién, cuándo y por qué ocurre el problema.

¿Qué dificultad tienes al describir un problema?

Comenzar desde un boceto es una excelente manera. Se puede representar como una matriz de descripción del problema que incluye consejos para identificar las cinco W (consulte la tabla a continuación).

Los datos necesarios para completar la matriz se pueden encontrar a través de entrevistas específicas, datos históricos o análisis preliminares que se pueden realizar rápidamente a bajo costo.


A continuación, se debe utilizar la matriz para escribir la descripción detallada del problema. Por ejemplo: “Nuestro departamento de procesamiento de órdenes de trabajo ha visto un promedio mensual de quejas un 20% más alto en los últimos tres meses después de introducir la nueva herramienta para administrar órdenes de trabajo para todos los departamentos de la organización”.

Una descripción objetiva con datos relevantes ayudará al equipo en los siguientes pasos, que tienen como objetivo investigar las causas y definir posibles acciones para que la tasa de quejas vuelva a disminuir.

Más consejos para describir un problema
Para ayudarte, echa un vistazo a un resumen de seis buenas prácticas a la hora de describir un problema.


1. Escribe la descripción del problema pensando en el público

Ten en cuenta que probablemente tendrás que convencer a la gerencia para que te proporcione recursos para resolver el problema y reclutar a miembros del equipo para que te ayuden. No querrás gastar tu precioso tiempo explicando repetidamente lo que estás tratando de lograr. Por lo tanto, sea claro y objetivo al describir el problema.

2. Mantenga la descripción del problema concisa e incluya al menos:

  • Una breve descripción del problema;
  • Indicación de dónde se está produciendo el problema;
  • La cantidad de tiempo durante el cual ocurre el problema;
  • El tamaño o la magnitud del problema.

3. Tenga cuidado de no reducir demasiado la descripción del problema

Una tendencia natural es escribir una descripción del problema de una manera muy simplista, ya que ya estás familiarizado con ella. Recuerde que otras personas también necesitan entender el contexto y el significado para poder ayudarlo a resolver el problema. Así que trata de proporcionar suficiente contexto e información para todos.

4. Cuidado con la solución

No incluya ninguna indicación o especulación sobre la causa del problema o las acciones que se tomarán para resolverlo. Nunca intentes resolver el problema o dirigir la solución en esta etapa.

5. Que sea fácil de interpretar

Elimine la información que conduzca a algún sesgo de interpretación. La intuición no es bienvenida en esta etapa, siempre sé objetivo y evita dejar algo dudoso.

6. Incluya números cuando sea posible

Incluya alguna cuantificación de la magnitud del problema para ayudar a los lectores a tomar una mejor decisión.

Conclusión

El soporte del software de gestión de problemas es crucial para guiar a las personas a través de la descripción y corrección de un problema.

Con las soluciones de SoftExpert, usted tiene las herramientas que necesita para ayudar a su organización a investigar incidentes, accidentes, errores, defectos, fallas y desviaciones en diversas áreas de actividad.

Preguntas frecuentes

¿Cómo empezar a redactar un problema?

Para comenzar, organiza la información usando la matriz de los cinco Ws: Quién está implicado, Dónde ocurre, Qué sucede, Cuándo se manifiesta y Por qué es importante. Apóyate en datos objetivos, como registros o entrevistas, y evita suposiciones o soluciones anticipadas. Este enfoque te ayuda a estructurar el problema de forma clara y neutral.

¿Cómo describir una situación problemática?

Sé breve y directo: incluye el lugar, el periodo, las personas afectadas y el impacto medible (por ejemplo, costes económicos o pérdida de productividad). Usa cifras o porcentajes para evitar ambigüedades y céntrate solo en hechos comprobables, sin entrar en causas ni soluciones. Así lograrás claridad y mostrarás la dimensión real del problema.

¿Cómo informar sobre un problema?

Utiliza la estructura 5W2H, que añade el Cómo ocurre y Cuánto impacto genera. Aporta datos concretos (como frecuencia o costes) para que quienes lo lean entiendan la urgencia y el alcance. Evita conjeturas y prioriza la información verificable para no sesgar los siguientes pasos.

¿Cómo redactar una hipótesis?

Una hipótesis es una explicación que se puede poner a prueba. Puedes formularla como una afirmación directa (por ejemplo: “El fallo se debe a X”) o como una condición (“Si pasa X, entonces ocurre Y”). Basa tu hipótesis en datos previos y en vacíos detectados en la matriz, y asegúrate de que sea específica y medible para poder analizarla.

¿Cómo hacer un análisis de un problema?

Recoge los datos de la matriz y aplica métodos como los 5 Porqués o el diagrama de Ishikawa para explorar posibles causas. Combina evidencias cuantitativas (como indicadores) y cualitativas (como entrevistas) para validar cada hipótesis y evitar conclusiones apresuradas.

Cómo reportar un problema en el trabajo?

Incluye todo el contexto: lugar, periodo, frecuencia e impacto medible (como horas perdidas o costes adicionales). Usa un lenguaje claro y adaptado al público, ya sea tu equipo o tus responsables. No propongas causas sin haberlas analizado antes, así mantendrás la credibilidad y facilitarás el apoyo para resolverlo.

Tomado de: https://blog.softexpert.com/

5 PORQUÉS: QUÉ ES Y CÓMO APLICAR CORRECTAMENTE ESTA METODOLOGÍA PARA RESOLVER PROBLEMAS DE RAÍZ

¿Alguna vez te has enfrentado a un problema recurrente y has pensado: “¿Por qué sigue ocurriendo esto?” La metodología de los 5 Porqués te ayuda a llegar a la raíz del problema — de forma sencilla, directa y eficaz, haciendo una única pregunta: ¿por qué?
 

¿Qué es el método de los 5 porqués?

Cuando nos enfrentamos a un problema, es muy común tratar de solucionarlo observando sus síntomas. Es algo que proviene del instinto humano. Sin embargo, este tipo de enfoque tiene un efecto parcial o temporal. Además, si no se trata su causa raíz, es posible que el problema se repita, lo que se conoce como reincidencia.

Fue para lidiar con esto que Taiichi Ohno, ingeniero de Toyota, creó la metodología en los años 70, detallada en su libro Toyota System Production (TPS). Además de los 5 porqués, Taiichi también inventó el pensamiento lean y el kanban.

En su enfoque, Taiichi creó una forma de resolver problemas internos de manera eficiente y sencilla. Estas características han hecho que los 5 porqués sean tan populares. Es por eso que muchas personas todavía creen que esta es una herramienta exclusiva de la industria automotriz.

Sin embargo, esta estrategia funciona en empresas de cualquier tamaño o segmento.

Lo importante es que existe la necesidad de resolver problemas e implementar acciones correctivas de forma rápida, sencilla y eficaz.

¿Cómo aplicar los 5 Porqués en la prática?

La aplicación de los 5 porqués es bastante sencilla: cuando identificas un problema, te preguntas “por qué” cinco veces, hasta llegar a la causa del problema. Es importante aclarar que “cinco” es solo un número sugerido por el método.

Habrá casos en los que será necesario continuar más allá de las cinco preguntas, al igual que también habrá situaciones en las que la causa raíz del problema surgirá antes que la quinta pregunta.

¿Cuáles son los pasos para usar los 5 Porqués? 

|1. Forma un equipo cualificado: Una persona no puede resolverlo todo. Cuente con un equipo que conozca bien el proceso y los detalles del problema que hay que corregir. Debe contar con un facilitador, que guiará a los demás participantes y ayudará a mantener el foco en identificar las causas del tema analizado.

2. Describe el problema con claridad: Para ello, utiliza documentos, registros, correos electrónicos y otros elementos útiles, observando todo lo que está sucediendo. Así, todos tendrán el mismo enfoque y los detalles no pasarán desapercibidos.

3. Pregunta: “¿Por qué ocurrió este problema?”: Evite responder a esta pregunta con suposiciones o hipótesis. Asegúrese de que cada respuesta se base en pruebas concretas y en hechos o datos.

4. Repite la pregunta “¿por qué?” hasta llegar a la causa raíz: Recuerda que cinco es solo una referencia. En ciertos problemas tendrás que repetir la pregunta más veces, mientras que en otros podrás determinar la causa raíz antes de eso.

5. Define acciones correctivas, asigna responsables y haz seguimiento: Otro punto que suele causar confusión es saber el momento correcto para cerrar las preguntas y finalizar el análisis. Esto suele ocurrir cuando se hace la pregunta y no se llega a una respuesta con pruebas.

Una vez identificada la causa raíz del problema, el equipo debe definir qué acciones se tomarán para corregirlo, evitando que se repita.

¿Cuál es un ejemplo claro de aplicación de los 5 Porqués?

Ya conoces el concepto detrás del funcionamiento de los 5 porqués. Para ayudarte a poner esto en práctica, hemos preparado un ejemplo ilustrativo de la aplicación de esta herramienta.

Ejemplo de uso de los 5 Porqués:  

Problema que debe analizarse: Las piezas están pintadas de forma incompleta.

  • Primero, ¿por qué? La cabina de pintura se apagó en medio del proceso.
  • Segundo, ¿por qué? Había falta de electricidad.
  • Tercero, ¿por qué? El disyuntor terminó disparándose.
  • Cuarto, ¿por qué? El cableado del disyuntor se derritió y se cortocircuitó.
  • Quinto, ¿por qué? El cableado instalado en el disyuntor era inadecuado y de mala calidad.

¡Esa es la causa raíz!

¿Cómo validar con razonamiento inverso? Piensa de esta manera:  

  1. El cableado de alimentación era inadecuado; 
  2. Esto provocó un sobrecalentamiento; 
  3. El sobrecalentamiento hizo que la cubierta de plástico se derritiera y se cortocircuitara; 
  4. El cortocircuito disparó el disyuntor e interrumpió el funcionamiento de la cabina; 
  5. Esto significó que el proceso de pintura no se completó.

¿Qué hacer tras identificar la causa raíz? 

Con la identificación de la causa raíz, el equipo debe discutir y definir qué acciones se implementarán para evitar que el problema vuelva a ocurrir. Siguiendo nuestro ejemplo anterior, una medida adecuada sería reemplazar el cableado de alimentación por uno que cumpla con las recomendaciones del fabricante de la cabina de pintura.

El equipo responsable del mantenimiento del equipo debe monitorear la implementación de estas acciones correctivas y evaluar si fueron efectivas y realmente eliminaron la causa del problema.

¿Y si el problema persiste? 

Si la causa raíz persiste incluso después de analizar e implementar medidas correctivas, repita el método de los 5 porqués.

Esta persistencia es un indicador de que la verdadera razón del problema aún no se ha identificado y resuelto correctamente, y que esto debe hacerse.

¿Cuál es la mejor forma de aplicar los 5 Porqués? 

Además de entender el proceso de aplicación de los 5 porqués, también es necesario seguir buenas prácticas para garantizar que la metodología se utilice de la mejor manera.

1. Describa el problema con claridad

En primer lugar, reúna al equipo responsable de identificar la causa del problema y descríbalo con la mayor precisión posible. Sea lo más objetivo y conciso posible para aumentar la claridad, la eficiencia y la simplicidad del proceso.

2. Documenta todo el proceso cuidadosamente

Como ya has visto, registrar los pasos y anotar las decisiones y tareas es fundamental. Esto evita fallos, aporta transparencia y agiliza todo el proceso. Esto también optimiza la comunicación para todos los involucrados, especialmente cuando se realiza a través de un software de gestión de calidad.

3. Planificar las soluciones e implementarlas correctamente

No lo olvides: encontrar la causa de un problema no es suficiente, es fundamental definir soluciones para él. Junto con todo el equipo, comprenda qué corregirá el problema y evitará que se repita. También registra todo esto y define a los responsables de cada acción.

La  metodología 5W2H  y las plantillas de planes de acción pueden ser grandes aliados para facilitar todo este proceso.

4. Crear formas de monitorear los resultados y revisar las medidas adoptadas

Los procesos y actividades de una empresa están en constante cambio. Del mismo modo, cualquier problema (y sus causas raíz) también puede cambiar. Por lo tanto, crear formas de medir la eficiencia de las soluciones adoptadas y revisar todo esto cada vez que se cambie un elemento vinculado a él.

5. Sepa cuándo detenerse

Por último, algo que puede parecer sencillo, pero muy importante: saber cuándo parar. Las actividades complejas tienen varios elementos que están conectados. Así, un problema que parecía simple al principio puede ser en realidad el síntoma de algo más profundo.

Por lo tanto, mantente enfocado y siempre trata de entender qué es, objetivamente, está causando esa situación, y qué puede ser realmente un nuevo problema.

En resumen: ¿Por qué utilizar los 5 Porqués?

La metodología de los 5 Porqués es una herramienta simple, de bajo coste y altamente eficaz para empresas que buscan resolver problemas de forma estructurada, atacando la causa en lugar de los efectos. .

Al combinar un equipo calificado que conoce el método y con sus procesos claros y organizados, tiene una poderosa herramienta para identificar y resolver fallas.

Preguntas frecuentes sobre el método de los 5 Porqués

¿Es necesario hacer exactamente 5 preguntas en el método?  

No necesariamente. El número cinco es una guía. Pueden ser 3 o 7 — lo importante es llegar a la causa real.  

¿Puedo usar el método junto con otras herramientas?  

Sí. Suele combinarse con 5W2H, Diagrama de Ishikawa y sesiones de brainstorming.  

¿Cómo saber si encontré la causa raíz?  

Cuando ya no hay respuestas basadas en hechos o cuando la solución elimina el problema de forma definitiva.  

¿Y si no logro identificar la causa raíz con este método? 

Tal vez necesites más datos o revisar la definición inicial del problema. 

¿Hace falta software para aplicar los 5 Porqués?  

No, aunque herramientas digitales como SoftExpert Suite pueden agilizar el proceso, centralizar el análisis y automatizar el plan de acción. 

¿La herramienta 5W2H complementa a los 5 Porqués?   

Sí. Ayuda a transformar la causa raíz en acciones prácticas y bien estructuradas.

Tomado de: https://blog.softexpert.com/

sábado, 17 de mayo de 2025

GESTIÓN DE RIESGOS SIN COMPLICACIONES: CONOCE LAS ETAPAS FUNDAMENTALES

La gestión de riesgos es el proceso de identificar, evaluar y controlar las amenazas financieras, legales, estratégicas y de seguridad que pueden afectar las operaciones de una empresa.
 

Estos riesgos pueden surgir de diversas fuentes, como incertidumbres financieras, problemas tecnológicos, errores de gestión estratégica, desastres naturales y responsabilidades legales.

Varias instituciones han desarrollado estándares de gestión de riesgos, como la Organización Internacional de Normalización con la ISO 31000, el Project Management Institute (PMI), el National Institute of Standards and Technology (NIST) y sociedades actuariales. Los métodos, definiciones y objetivos pueden variar según el estándar elegido y el contexto específico de cada empresa.

Un buen programa de gestión de riesgos ayudará a tu organización a manejar mejor todas las amenazas que enfrenta. Este campo de conocimiento también evalúa la relación entre los diferentes tipos de riesgos corporativos y el efecto dominó que pueden tener en los objetivos estratégicos de tu compañía.

¿Quieres saber cuáles son las etapas fundamentales para gestionar los riesgos correctamente? ¡Sigue leyendo que te lo explicamos!

Importancia de la gestión de riesgos

Un evento negativo inesperado puede tener diversas consecuencias para tu organización. Con suerte, el impacto será mínimo, como un pequeño efecto en tus inversiones trimestrales, requiriendo solo una reorganización del presupuesto.

Pero, en el peor de los casos, el evento puede ser catastrófico y tener consecuencias graves. En situaciones extremas, el resultado puede ser un gasto significativo en contención de daños o incluso el cierre de tu negocio.

Por eso, es crucial para la sostenibilidad de la organización que el consejo de directores tome en serio la gestión de riesgos. Es necesario evaluar bien la exposición a amenazas, los procesos para gestionarlas y las personas responsables de hacerlo.

Cada vez es más popular la gestión de riesgos proactiva, evaluando frecuentemente la probabilidad de enfrentar diferentes tipos de pérdidas. Al mismo tiempo, las organizaciones pueden definir qué impactos negativos son aceptables y cuáles requieren una reacción inmediata.

Esto contrasta con la gestión reactiva, que era más común en décadas pasadas. En ese caso, las empresas corregían riesgos que ya habían causado daños y solo cambiaban sus prácticas después de que una nueva amenaza provocara problemas.

Tipos de riesgos corporativos

La gestión de riesgos empresariales busca manejar seis tipos de amenazas diferentes, que van desde problemas de cumplimiento hasta cuestiones financieras o de seguridad. Estos riesgos potenciales pueden afectar negativamente el ambiente de trabajo, amenazando el futuro de tu empresa e incluso la salud de los empleados.

Aquí tienes los seis tipos de riesgos corporativos que puedes encontrar:

1. Salud y seguridad: Estas amenazas pueden aparecer de diversas maneras, tanto en oficinas como en fábricas o sitios de construcción. Incluyen cuestiones físicas, ergonómicas, químicas y biológicas que pueden afectar la salud o el bienestar físico de los empleados.

2. Financieros: Aquellos que representan una posibilidad de pérdida financiera repentina e inmediata. Ejemplos son las fluctuaciones en las tasas de cambio, la pérdida de crédito y la falta de liquidez.

3. Reputación: Los riesgos de reputación pueden afectar negativamente la percepción pública de la empresa. Ejemplos incluyen reportajes negativos o publicaciones en redes sociales que se vuelvan virales.

4. Operacionales: Posibilidades de pérdidas relacionadas con procesos internos, personas o sistemas. Incluyen fallos en los sistemas de TI, fraudes, litigios, entre otras situaciones.

5. Cumplimiento: Falta de cumplimiento con legislaciones, políticas o mejores prácticas de negocios. Puede resultar en problemas financieros o legales, y en el peor de los casos, en la clausura de la empresa.

6. Estratégicos: Amenazan el futuro a largo plazo de la empresa. Incluyen la llegada de nuevos competidores al mercado o avances tecnológicos que hagan obsoleto tu producto.

¿Qué es la ISO 31000?

El estándar más conocido para la gestión de riesgos empresariales es la ISO 31000, desarrollado y mantenido por la Organización Internacional de Normalización (ISO). Describe un proceso de gestión de riesgos que puede ser utilizado por cualquier entidad e incluye los pasos necesarios para identificar, evaluar y gestionar las amenazas a tu organización.

Aquí tienes los cinco pasos definidos por la ISO, que explicaremos en más detalle a continuación:

  1. Identifica los riesgos que enfrenta tu organización.
  2. Analiza la probabilidad y el impacto potencial de cada uno.
  3. Evalúa y prioriza las amenazas según tus objetivos de negocio.
  4. Gestiona las condiciones de riesgo o crea respuestas para ellas.
  5. Monitorea los resultados de los controles de riesgo y haz los ajustes necesarios.


Para que tu organización tenga un conocimiento sólido de lo que está ocurriendo, el proceso de certificación ISO 31000 exige que comiences definiendo el alcance de tu gestión de riesgos. También es necesario que tu equipo determine el contexto de negocio en el que se va a aplicar y cree criterios de riesgos.

El objetivo del estándar es permitirte saber cómo se clasifica cada riesgo identificado dentro de la categorización de “aceptable” o “inaceptable”. A partir de ahí, es posible definir qué acciones deben tomarse para preservar y mejorar los valores de tu organización.

Etapas fundamentales para la gestión de riesgos

Los riesgos, esenciales para las decisiones estratégicas, son la principal causa de incertidumbre en las organizaciones y pueden afectar sus procesos, actividades, productos y servicios. La gestión de riesgos corporativos ayuda a manejar estas incertidumbres, aumentando la capacidad de generar valor y permitiendo decisiones estratégicas más eficientes y cambios organizacionales efectivos.

Una buena gestión de riesgos puede reducir la probabilidad de eventos adversos y mejorar la eficiencia operativa. Además, ofrece beneficios como informes financieros más precisos, reducción del coste de capital y ventaja competitiva, beneficiando incluso a empresas de servicio público con mejor apoyo político y comunitario.

Vamos a ver ahora las principales etapas para la gestión de riesgos:

1. Identificación

La etapa de identificación requiere un análisis minucioso, donde se deben considerar todos los escenarios posibles para asegurar una cobertura completa de amenazas potenciales. Los riesgos identificados deben documentarse de forma clara y detallada para establecer un entendimiento común entre todas las partes interesadas, asegurando la base para medidas efectivas de mitigación.

Siguiendo las directrices de la ISO 31000, la identificación de riesgos debe involucrar la colaboración entre diferentes departamentos de la organización, promoviendo un enfoque integrado y completo. Esta colaboración no solo facilita la identificación de riesgos, sino que también promueve la transformación digital al asegurar que todos los equipos estén alineados hacia la excelencia operativa y el cumplimiento.

2. Evaluación

La evaluación de riesgos implica analizar la probabilidad de su ocurrencia y el impacto potencial que pueden causar. Este proceso sirve para asegurar el cumplimiento y promover la eficiencia operativa en las organizaciones.

El uso de soluciones modulares en el contexto de la transformación digital permite un enfoque sistemático, facilitando la identificación y mitigación de riesgos en diversas áreas funcionales. La colaboración entre departamentos ayuda a implementar estos procesos de manera efectiva, resultando en una excelencia operativa alineada con los objetivos estratégicos de la empresa.

3. Tratamiento

Un enfoque eficaz para el tratamiento de riesgos debe estructurarse considerando cuán aceptable es el riesgo en cuestión. En determinadas situaciones, la opción puede ser no actuar, pero esta decisión debe estar respaldada por un análisis riguroso.

Para promover el cumplimiento y la eficiencia en la organización, es necesario establecer un plan de acción adecuado. Este puede incluir estrategias para prevenir, reducir o transferir riesgos. El enfoque en soluciones modulares y la colaboración entre las diversas funciones de negocio maximizan la integración y la eficacia de la gestión de riesgos.

4. Monitoreo

Un proceso continuo de revisión es esencial para una gestión de riesgos proactiva, reevaluando las amenazas y monitoreando la situación de los tratamientos y controles implementados. La revisión periódica asegura que las medidas de mitigación sean efectivas y se ajusten según sea necesario.

La tecnología juega un papel crucial en el monitoreo, permitiendo la recopilación y análisis de datos en tiempo real. Esto facilita la identificación rápida de nuevos riesgos y la adaptación de las estrategias de gestión.

5. Comunicación

La comunicación en cada una de estas cuatro etapas anteriores es fundamental para un proceso efectivo de toma de decisiones en la gestión de riesgos. Asegura que todas las partes interesadas estén informadas y alineadas respecto a los riesgos y las estrategias de mitigación.

a transparencia en la comunicación facilita la colaboración y la confianza entre los departamentos. Esto resulta en una respuesta más rápida y coordinada a los riesgos emergentes, fortaleciendo la resiliencia organizacional.

Conclusión

La implementación de la gestión de riesgos no es solo una cuestión de control, sino de sostenibilidad y resiliencia para la empresa. Con una estrategia sólida, cada etapa trabaja para proteger el valor y la longevidad del negocio, desde la identificación hasta el monitoreo y la comunicación.

En un entorno corporativo cada vez más dinámico y globalizado, la gestión de riesgos se ha convertido en una herramienta estratégica para la toma de decisiones seguras, garantizando que las empresas no solo enfrenten adversidades, sino que también prosperen.

¿Buscando más eficiencia y conformidad en sus operaciones? Nuestros especialistas pueden ayudar a identificar las mejores estrategias para su empresa con las soluciones de SoftExpert. ¡Hable con nosotros hoy mismo! 

Sobre el autor:

Tobias Schroeder

MBA en Gestión Estratégica en la UFPR. Analista de negocio y de mercadeo en SoftExpert, proveedora de software para automatización y mejora de procesos de negocio, conformidad reglamentaria y gobernanza corporativa.

Tomado de: https://blog.softexpert.com/

viernes, 9 de mayo de 2025

LOS 10 ERRORES MÁS COMUNES EN LA GESTIÓN DE LA CALIDAD

La gestión de la calidad es un enfoque estratégico que tiene como objetivo asegurar que los productos o servicios de una organización cumplan con ciertos estándares de excelencia y satisfagan las expectativas del cliente. 

No se trata solo de controlar defectos, sino de mejorar continuamente todos los procesos involucrados. Abarca todas las actividades necesarias para diseñar, planificar, controlar y mejorar la calidad dentro de una organización. Está basada en principios fundamentales, algunos definidos por la norma ISO 9001.

Aquí tenéis una lista de algunos errores de los más comunes en la gestión de calidad que suelen cometerse en muchas organizaciones, especialmente si no existe una cultura sólida de mejora continua.

Errores comunes en la Gestión de Calidad

1. Falta de compromiso de la alta dirección

  • Es de vital importancia, que los líderes estén implicados en la gestión de la calidad, si no es así, dicha gestión, pierde fuerza y credibilidad.

2. No definir objetivos claros y coherentes

  • Las organizaciones deben tener metas específicas, medibles y alcanzables para poder ir evaluando el rendimiento y la mejora.

3. No formar adecuadamente al personal

  • En las organizaciones se debe entender que la calidad es responsabilidad de todos. Si las personas no entienden su rol y sus obligaciones, será difícil hacer una buena gestión de calidad.

4. Ausencia de cultura de mejora continua

  • Es un error clave no fomentar que la calidad no es algo puntual, sino que es un proceso constante.

5. Fijarse solo en la calidad del producto final

  • La calidad debe gestionarse a lo largo de todo el proceso, no solo al final. Corregir errores tarde es más caro.

6. Ignorar la retroalimentación del cliente

  • Es muy importante escuchar qué nos dicen los clientes para aprender y mejorar en nuestra gestión.

7. No documentar procesos ni resultados

  • Se debe tener una trazabilidad y documentación mínima de nuestros procesos y procedimientos para aprender de los errores cometidos y no volver a cometerlos.

8. Uso inadecuado de herramientas de calidad

  • Aplicar herramientas sin comprenderlas bien puede generar resultados incorrectos o ineficaces.

9. No realizar auditorías internas

  • Es fundamental realizar auditorías internas periódicas para detectar desviaciones antes de que causen algún problema mayor.

10. Enfocarse solo en cumplir normas 

  • Cumplir con ISO u otras certificaciones es importante, pero no debe ser el único objetivo. La publicidad corporativa debe guardar y mantener plena coherencia con los objetivos corporativos.

Si requiere información detallada sobre la gestión de la calidad u otra norma ISO, no dude en comunicarse.

Tomado de: https://isotools.org/

 

miércoles, 7 de mayo de 2025

LA IMPORTANCIA DE LA GESTIÓN DE RIESGOS, SEGÚN LA NORMA ISO 27001

La gestión de riesgos es uno de los pilares fundamentales de la norma ISO/IEC 27001, que establece los requisitos para un sistema de gestión de seguridad de la información (SGSI). 

Esta norma internacional es ampliamente utilizada por organizaciones que desean garantizar la confidencialidad, integridad y disponibilidad de su información.

Importancia de la gestión de riesgos según la ISO 27001

1. Identificación proactiva de amenazas y vulnerabilidades

La norma promueve el identificar qué activos de información están en riesgo en cada organización, cuáles son las amenazas que podrían afectarlos y cuáles son sus vulnerabilidades.

2. Evaluación y tratamiento de riesgos

La norma ISO 27001 exige que las organizaciones certificadas bajo esta norma, hagan una evaluación de sus riesgos en función de su probabilidad e impacto, y que a la vez, definan planes de acción y medidas de tratamiento adecuadas para saber en un momento dado, cómo aceptarlos, cómo mitigaros, transferirlos o evitarlos.

3. Decisiones basadas en el riesgo

Los controles de seguridad, y las decisiones sobre los mismos, se toman teniendo en cuento un análisis racional de los riesgos identificados en cada organización y de su evaluación.

4. Mejora continua del SGSI

El ciclo PDCA (Planificar, Hacer, Verificar, Actuar) que rige la ISO 27001 permite que la gestión de riesgos sea dinámica y se ajuste a cambios en el entorno, la tecnología o la organización.

5. Cumplimiento legal y contractual

Si tenemos una buena gestión de riesgos, contribuimos a facilitar el cumplimiento con los requisitos legales, normativos y contractuales en materia de seguridad de la información.

6. Confianza y reputación

Tener una buena gestión de riesgos, refuerza que nuestros clientes y partes interesadas tengan más confianza en nuestros productos o servicios, lo que se traduce en una ventaja competitiva sostenible.

Principales riesgos a evaluar según ISO 27001

1. Acceso no autorizado a la información

Riesgo de que personas no autorizadas accedan a información confidencial, lo que puede comprometer la privacidad y seguridad de los datos.

2. Pérdida de disponibilidad de los sistemas

Fallos técnicos, ataques de denegación de servicio (DDoS) o desastres naturales pueden impedir el acceso a los servicios o datos cuando se necesitan.

3. Pérdida o corrupción de datos

Riesgo de que los datos se borren accidentalmente, se modifiquen de forma indebida o se dañen por errores humanos o fallos tecnológicos.

4. Errores humanos

Acciones involuntarias de los empleados, como enviar un correo con información sensible a la persona equivocada o usar contraseñas débiles.

5. Fugas de información

Divulgación no autorizada de información, ya sea por ataques externos, malware o comportamientos negligentes.

6. Ataques de software malicioso (malware/ransomware)

Programas diseñados para dañar, robar o cifrar datos que pueden paralizar la actividad de una organización.

7. Fallos en proveedores externos

Dependencia de servicios externos (como la nube) que pueden sufrir interrupciones, brechas de seguridad o no cumplir con los estándares.

8. Ingeniería social y phishing

Manipulación psicológica a empleados para obtener acceso a datos o sistemas mediante engaños.

9. Falta de cumplimiento legal o normativo

Riesgo de sanciones o pérdidas por no cumplir con leyes como el RGPD (Reglamento General de Protección de Datos) o requisitos del sector.

10. Riesgos relacionados con el teletrabajo y dispositivos móviles

Acceso remoto a sistemas corporativos con posibles brechas de seguridad si no se gestionan adecuadamente.

Cada uno de estos riesgos debe ser evaluado y tratado según su probabilidad de ocurrencia y su impacto, siguiendo el enfoque de mejora continua del SGSI que propone ISO 27001 y de ser necesario, consultar la ISO 31000.

Tomado de: https://isotools.org/

 

ISO 55001 REQUISITOS PARA LA GESTIÓN DE LOS ACTIVOS

La norma ISO 55001 es un estándar internacional publicado por ISO que define los requisitos para un sistema de gestión de activos. 

Está especialmente orientada a organizaciones que quieren tener un sistema de gestión de activos eficaz, que quieren implementarlo, mantenerlo e ir mejorándolo periódicamente.

¿Qué es ISO 55001?

La ISO 55001 forma parte de la serie ISO 55000 y proporciona una estructura para la gestión eficaz de activos físicos y no físicos. El objetivo es maximizar el valor que una organización obtiene de sus activos durante todo su ciclo de vida.

Requisitos clave de ISO 55001

La norma ISO 55001, está estructurada con el mismo esquema que las normas ISO 9001 de Gestión de la Calidad y la norma ISO 14001 de Gestión del Medio Ambiente. Los principales requisitos se agrupan en los siguientes grupos:

1. Contexto de la organización:

  • Comprensión de la organización y su contexto.
  • Determinación de las necesidades y expectativas de las partes interesadas.
  • Definición del alcance del sistema de gestión de activos.

2. Liderazgo

  • La alta dirección debe estar comprometida.
  • Política de gestión de activos.
  • Definición clara de roles y responsabilidades dentro de la organización.

3. Planificación

  • Hay que realizar una evaluación de riesgos y oportunidades.
  • Tener claros los objetivos de gestión de activos.
  • Definir planes para conseguir los objetivos.

4. Apoyo

  • Contar con los recursos adecuados.
  • El personal debe estar formado y tener las competencias necesarias.
  • Buena comunicación interna y externa.
  • La información debe estar documentada.

5. Operación

  • Debemos tener una planificación y control operativo.
  • Hay que gestionar el ciclo de vida de cada activo.
  • Control del Gestión del cambio.

6. Evaluación del desempeño

  • Debemos hacer seguimiento, medición, análisis y evaluación.
  • Gestión de Auditorías internas.
  • Revisión por la dirección.

7. Mejora

  • No conformidades y acciones correctivas.
  • Mejora continua del sistema.
  • Beneficios de implantar ISO 55001
  • Optimización del rendimiento y vida útil de los activos.
  • Reducción de costes de mantenimiento y operación.
  • Mejora en la toma de decisiones basada en datos.
  • Cumplimiento normativo y mejora de la sostenibilidad.
  • Mayor confianza de las partes interesadas.

Tomado de: https://isotools.org/

 

CARACTERÍSTICAS Y BENEFICIOS DE LA NORMA ISO 56001:2024

ISO 56001:2024, norma internacional que establece los requisitos para un sistema de gestión de la innovación, está diseñada para ayudar a las organizaciones a establecer procesos eficaces para fomentar, desarrollar y mantener la innovación de forma sistemática y sostenible.

Características principales de la ISO 56001:2024

1. Enfoque basado en procesos

Estructura similar a otras normas ISO (como la ISO 9001) con enfoque PDCA (Planificar-Hacer-Verificar-Actuar).

Permite integrar fácilmente la innovación con otros sistemas de gestión existentes.

2. Marco sistemático para la innovación

Establece un sistema claro para identificar oportunidades, generar ideas, evaluar riesgos y transformarlas en valor.

3. Orientación estratégica

La innovación debe estar alineada con la visión y los objetivos estratégicos de la organización.

Se promueve una gestión activa de la cartera de innovación.

4. Cultura de innovación

Fomenta entornos que apoyen la colaboración, creatividad, liderazgo y aprendizaje organizativo.

Da importancia al compromiso de la alta dirección.

5. Gestión del conocimiento y la información

Promueve el uso eficaz del conocimiento interno y externo, así como la vigilancia tecnológica y de mercado.

6. Evaluación y mejora del sistema

Establece indicadores para medir el rendimiento del sistema de innovación.

Favorece la mejora continua para mantener la competitividad a largo plazo.

7. Aplicabilidad universal

Puede ser aplicada a organizaciones de todos los tamaños y sectores, desde pymes hasta multinacionales.

8. Enfoque en la sostenibilidad

Considera los impactos sociales, ambientales y económicos de las innovaciones desarrolladas.

Aporta múltiples beneficios estratégicos y operativos a cualquier organización. A continuación, te detallo los principales:

Beneficios principales de la ISO 56001:2024:

  • Impulso a la innovación estructurada
  • Permite gestionar la innovación de manera sistemática, integrándola en todos los niveles de la organización.
  • Fomenta una cultura innovadora dentro de la empresa.
  • Mayor competitividad
  • Ayuda a las organizaciones a diferenciarse en el mercado mediante la creación de productos, servicios o modelos de negocio innovadores.
  • Mejora continua
  • Al seguir un sistema basado en la mejora continua (ciclo PDCA), se logra un perfeccionamiento constante de los procesos de innovación.
  • Alineación estratégica
  • Asegura que las iniciativas de innovación estén alineadas con la visión, misión y objetivos estratégicos de la empresa.
  • Reducción de riesgos
  • Minimiza los riesgos asociados a proyectos innovadores mediante una gestión eficaz basada en la norma.
  • Acceso a financiación
  • Puede facilitar el acceso a subvenciones o financiación, ya que muchas convocatorias valoran positivamente la implantación de normas ISO.
  • Reconocimiento y reputación
  • Eleva la imagen de la empresa ante clientes, inversores y socios como una entidad comprometida con la innovación y la excelencia.
  • Mejor colaboración
  • Fomenta la colaboración interna entre departamentos y también con agentes externos como universidades, centros tecnológicos o startups.

Tomado de: https://isotools.org/

martes, 6 de mayo de 2025

CÓMO MEDIR LA SATISFACCIÓN DE LOS CLIENTES EN TU NEGOCIO

Proporcionar a tus clientes la mejor experiencia posible cuando compran y usan tus productos o servicios debería ser una de tus prioridades. Para saber si tus acciones son acertadas, necesitas medir la satisfacción de tus clientes.

Te permitirá identificar áreas de mejora, fortalecer la fidelización y en definitiva aumentar la rentabilidad de tu negocio. Por eso, he querido hacerte una síntesis de métodos y herramientas a tu disposición para conseguir tus objetivos.

1. Encuestas de satisfacción

Si quieres saber lo que opinan los clientes de tu negocio, la lógica dictamina que se lo preguntes directamente. De allí que las encuestas sean una de las formas más comunes y eficaces para medir la satisfacción del cliente. Se pueden realizar en distintos momentos del proceso de compra. Evidentemente, hay que personalizarlas según las necesidades de tu negocio.

¿Qué tipos de encuestas puedes realizar?

Generalmente, tienes tres grandes tipos de encuestas de satisfacción.

Las encuestas de puntos de contacto son aquellas en las que se hace una evaluación inmediata tras la interacción con la empresa. Te sonará este tipo de encuesta de cuando te ofrecen responder a unas preguntas después de que hayas llamado por teléfono a atención al cliente, por solo poner un ejemplo.

Otro ejemplo son las encuestas postcompra, es decir aquellas enviadas después de que el cliente haya recibido el producto o servicio. Lo hacen mucho las tiendas online, pero también se puede citar esos dispositivos en los baños de sitios públicos donde piden pulsar un botón emoji para valorar tu opinión.

Además, también se pueden realizar encuestas periódicas a los clientes. Obtener regularmente el feedback permite evaluar tendencias en la percepción de satisfacción.

¿Cómo hacer las encuestas?

No quiero entrar demasiado en detalle, porque ya tengo un artículo sobre el cuestionario de satisfacción al cliente, pero es importante citar algunas de las maneras de realizar las encuestas.

  • Hoy en día, sin duda una de las más eficientes es mediante el correo electrónico. Para eso puedes usar una herramienta de envío masivo de emails, como por ejemplo Mailrelay. Es una plataforma fiable con décadas de experiencia. Es fácil de usar, potente y tiene buena entregabilidad. Además, cuenta con la mayor cuenta gratuita, por lo que la puedes probar a fondo sin coste. Tiene más cosas, como un editor con capacidad IA, estadísticas, API de desarrollo, y un soporte humano para todos los clientes, incluso los que usan una cuenta gratuita.
  • También puedes realizar llamas telefónicas, siempre que el cliente haya dado previamente su acuerdo. Aunque es cierto que las llamadas a menudo se sienten más intrusivas.
  • Evidentemente, también puedes realizar encuestas en el momento de la interacción directa con el cliente, ofreciéndole responder a unas preguntas. A menudo se le proporciona al usuario una tablet donde puede responder rápidamente. La ventaja es que los datos se quedan registrados inmediatamente.

2. Indicadores claves de rendimiento (KPIs)

Hemos hablado de las encuestas, pero esos cuestionarios no servirían de nada sin un análisis y seguimiento de unos indicadores específicos.

Algunos de los KPIs más habituales son:

  • Net Promoter Score (NPS)

Es una de las métricas más populares. Evalúa la lealtad del cliente preguntando: “¿Cuán probable es que recomiende el producto/servicio?”. Seguro que has tenido que responder a esa pregunta muchas veces. Algunos expertos consideran que es un indicador un tanto simplista, pero es una buena primera aproximación a la satisfacción del cliente.

  • Customer Satisfaction Score (CSAT)

Mide la satisfacción mediante preguntas de calificación, por ejemplo: “¿Cómo calificaría su experiencia?”. Su principal ventaja es que ayuda a detectar áreas de mejora, es decir aspectos del negocio donde el CSAT es inferior al resto de las preguntas.

  • Customer Effort Score (CES)

Analiza la facilidad con la que los clientes logran resolver sus interacciones con la empresa. Una puntuación alta no necesariamente se traduce en mayor satisfacción, pero al menos significa que los clientes consideran que usar tu producto o servicio, o resolver un problema concreto es sencillo.

3. Análisis de comentarios y opiniones

Hasta ahora estábamos hablando de preguntar directamente al cliente su opinión. Pero, a menudo, no hace ni falta. Porque en nuestra economía digital, los usuarios y clientes tienen muchas opciones para valorar tu negocio por su cuenta. Deberías prestar mucha atención a esos comentarios.

  • Reseñas y opiniones en plataformas

Me refiero a los comentarios y notas dejadas en Google, Trustpilot, Tripadviser, Amazon, y otras plataformas similares. Esos comentarios son muy importantes porque influyen directamente en la decisión de otras personas de comprar tus productos o servicios. Por eso, es fundamental no solo seguirlos, pero analizarlos para detectar puntos de mejora.

  • Comentarios en redes sociales

Este tipo de comentarios también puede ser una fuente muy interesante de información para saber lo que funciona o lo que no en tu negocio.

  • Quejas y reclamaciones

Por supuesto, si un cliente dirige directamente una queja a tu servicio de atención, o si llega a poner una reclamación, también será un dato que deberás analizar con mucho cuidado.

  • Herramientas de análisis de sentimiento

A veces no es tan fácil determinar la intencionalidad de un mensaje escrito, ni interpretarlo de una manera provechosa. Si quieres sacar datos útiles de todas esas opiniones y quejas en general, puedes usar las herramientas de análisis de sentimiento, que te ayudarán a identificar patrones en las opiniones de los clientes.

4. Análisis del comportamiento del cliente

Podríamos decir que el comportamiento del cliente es una forma de comunicación no verbal. Analizar sus acciones te permite sacar conclusiones importantes sobre su satisfacción y sobre los puntos que deberías mejorar en tu negocio.

  • Tasa de retención y abandono

Suponiendo que tu producto o servicio es de uso recurrente, si muchos de tus clientes lo usan solo una vez y luego no vuelven, entonces es probable que no hayan quedado muy contentos con la experiencia. Al contrario, si muy pocos clientes se van, probablemente estés haciendo las cosas bien. Aunque no es un indicador suficiente, permite detectar patrones.

  • Frecuencia de compra y uso

Recuerdo una clase de marketing en la universidad, hace muchos años, impartida por un profesor que también era director de marketing de una empresa de cosmética. Ya en aquel entonces usaban evolución de compra y uso del producto o servicio para anticipar el comportamiento del cliente. Porque, en muchas ocasiones, es gradual. El cliente te compra con menos frecuencia, porque está empezando a probar otras opciones. Y si decide que hay una mejor, se acaba yendo.

  • Interacción con el servicio de atención al cliente

Aunque no haya quejas o reclamaciones, medir la interacción con atención al cliente puede dar unas ideas de un empeoramiento (o una mejora) de la percepción de satisfacción del cliente. Normalmente, contactan cuando necesitan solucionar algo. Si cada vez hay más contactos, quizás haya algo que solucionar.

5. Benchmarking y comparación con la competencia

Cuando tengas datos de satisfacción, te interesa no solo medir su evolución a lo largo del tiempo, sino también poder compararte con otras empresas de tu sector. Hay industrias donde suele haber muchos clientes insatisfechos, como la telefonía o el transporte, mientas algunas empresas de tecnología reciben muchas opiniones positivas. De allí que haya que mirar como lo haces respecto a tus pares.

Para ello puedes usar herramientas como encuestas de mercado, plataformas de comparación de valoraciones, estudios de benchmarking del sector, etc.

Por ejemplo, si tienes un restaurante, verás que los establecimientos con mejor calidad de servicio suelen recibir notas en Google muy cercanas al máximo de 5, y con muchísimas reseñas reales. Si tienes un 3 en base a muchas opiniones, tienes un problema con la satisfacción de tus clientes.

Conclusión

Medir la satisfacción del cliente es una tarea esencial para cualquier negocio. Utilizar encuestas, KPIs, análisis de feedback y comportamiento permite obtener una visión completa de la experiencia del cliente. Implementar mejoras basadas en estos datos ayudará a fortalecer la relación con tus clientes y aumentar la competitividad del negocio.

Por Antoine Kerfant: Graduado de ESSEC en Administración de Empresas, soy un profesional con más de 25 años de experiencia en finanzas empresariales. Tras trabajar una década en varias multinacionales, llevo desde 2010 asesorando a emprendedores en mi consultora. Tengo dos áreas principales de conocimiento. Soy experto en el tema emprendedor, y hablo en particular de ideas de negocio, plan de empresa y gestión. Además, me he ido formando a lo largo de los años sobre SEO, marketing digital y negocios online en general.

Tomado de: https://crearmiempresa.es/

 

lunes, 5 de mayo de 2025

TENDENCIAS EN GESTIÓN DE RIESGOS Y CUMPLIMIENTO PARA 2025

En la vigencia 2025, analizar las tendencias en gestión de riesgos es una actividad obligatoria para los Risk Manager en esta área. 

Con un panorama geopolítico y corporativo complejo, 2025 es un año especialmente interesante para revisar las estrategias que utilizarán las organizaciones para enfrentar riesgos cada vez más diversos y dinámicos.

Mantenerse a la vanguardia es más importante que nunca. Por eso, adelantarse al nuevo año y evaluar las tendencias en gestión de riesgos para el año 2025 es una forma de iniciar el tratamiento de las amenazas más complejas a las que se han enfrentado las organizaciones hasta el momento.

Cuáles son las tendencias en gestión de riesgos y cumplimiento para 2025

La tercera década del siglo XXI ha traído destacadas innovaciones tecnológicas y también grandes desafíos ambientales. En un panorama así, las tendencias en gestión de riesgos y cumplimiento que ocuparán la agenda de los expertos en el área serán las siguientes:

1. Predominio del uso de IA para el análisis y gestión de riesgos

La incursión de la Inteligencia Artificial será decisiva en la gestión de riesgos. Las organizaciones tienen una herramienta que les permite procesar millones de datos en pocos segundos y obtener predicciones y escenarios hipotéticos con un alto grado de precisión. Son aspectos que ayudarán a tomar decisiones para enfrentar riesgos que se prevén para meses o años venideros.

La IA podrá establecer patrones y proporcionar información con una anticipación que no tiene precedentes en la historia. Es posible pensar que la gestión de riesgos trabajará sobre amenazas previstas para dos, cinco o diez años más adelante. Incluso, la hoy valorada gestión en tiempo real, pasará a ser obsoleta.

Gracias a los algoritmos de aprendizaje automáticos, los sistemas automatizados podrán señalar desviaciones o posibles infracciones de seguridad de la información solo analizando el comportamiento de los usuarios. Los equipos de gestión de riesgos dejarán de reaccionar para dedicarse a prevenir con una muy amplia anticipación.

2. Integración de los riesgos operativos con los de ciberseguridad

En un mundo cada día más interconectado y digital, cualquier riesgo de ciberseguridad se convierte también en operativo. Significa que una violación de seguridad puede anular la capacidad de la organización para operar. Es evidente, por ello, que la gestión de riesgos necesita integrarlos. Son amenazas interconectadas, relacionadas y, sobre todo, con consecuencias similares.

Por eso, las tendencias en gestión de riesgos para 2025 prevén evaluaciones de riesgos integrales, que aborden los riesgos cibernéticos a la par que los operativos. También se impondrán las plataformas unificadas que se ocupen de todas las posibles eventualidades, así como los equipos de trabajo en los que participen personas de todas las áreas. Los riesgos dejan de ser locales o específicos.

3. Riesgo climático

En este aspecto, las tendencias en gestión de riesgos se enmarcarán en tres vertientes: el trabajo para mitigar riesgos ambientales, la capacidad de adaptación a nuevas condiciones climáticas y la adopción de modelos ESG de gestión.

Los riesgos ambientales son prioritarios para las organizaciones por una cuestión de supervivencia, pero también de competitividad. Las empresas que logren disminuir o eliminar su huella de carbono tendrán una mejor percepción por parte de los consumidores y serán más apreciadas por inversores.

La capacidad para adaptarse a nuevas condiciones será clave para enfrentar el cambio climático como riesgo. Por supuesto, también está la capacidad de la organización para gestionar sus criterios ESG, pero esa es una de las tendencias en gestión de riesgos para 2025 que merece un capítulo aparte.

4. Integrar los factores ESG en la gestión de riesgos

Con la aparición de normativas que solicitan a las organizaciones informar sobre sus cuestiones ESG y sobre los resultados obtenidos, es evidente que estos factores adquieren un rol destacado en la gestión de riesgos.

Las organizaciones necesitarán establecer métricas e indicadores de riesgo e integrarlos en su gestión y en las evaluaciones de riesgos financieros. Es importante advertir que las empresas que no presenten informes ESG pueden quedar marginadas de recursos del sector financiero o de inversores públicos o privados.

También aparece un riesgo de cumplimiento implícito: precisamente, a partir de 2025, un buen número de organizaciones estarán obligadas a presentar informes ESG y de sostenibilidad. Esto hace que la integración de los factores ESG en la gestión de riesgos deje de ser opcional y se convierta en un asunto de competitividad y de cumplimiento.

Con estándares y regulaciones más exigentes, integrar la gestión ESG con la gestión de riesgos, sin duda, será una de las tendencias en gestión de riesgos en el nuevo año 2025.

 5. Gestión de riesgos en la cadena de suministro

La gestión de riesgos de proveedores cobra cada vez más relevancia. Las cadenas de suministro globales se hacen vulnerables a muchas amenazas, por ello, centrarán algunas de las tendencias en gestión de riesgos.

En 2025 se espera que los profesionales especializados en este campo monitoreen de forma continua el acontecer geopolítico y su incidencia en puertos y medios de transporte, así como cualquier otro evento que pueda suspender de improviso el suministro.

6. Adaptabilidad de la gestión de riesgos

Una de las preocupaciones para los equipos de gestión de riesgos será la volatilidad y el dinamismo del entorno. El marco regulatorio, las cuestiones políticas y financieras, la tecnología o el comportamiento de los consumidores pueden sufrir giros de 180 grados. Por ello, una de las tendencias en gestión de riesgos será la de trabajar para crear sistemas ágiles, adaptables y flexibles.

Además, se tenderá hacia la toma de decisiones inmediatas y al uso de recurso tecnológicos adecuados que permitan monitorear todos los frentes y obtener información en tiempo real sobre la evolución de la gestión de riesgos, los problemas que parecen ser inminentes o los puntos críticos en los que se concentra un número inusual de amenazas.

7. Aumentar la capacidad de resiliencia

Los equipos de riesgos entienden que, por ahora, no todas las amenazas se podrán contener, en especial si se trata de eventos de baja probabilidad y alto impacto. Por eso, además de trabajar en la prevención y la gestión proactiva, habrá que hacerlo en la capacidad de resiliencia.

Las organizaciones y sus equipos de riesgos desarrollarán en 2025 estrategias que aseguren la continuidad del negocio con niveles mínimos de operabilidad. Es importante entender que la resiliencia no se refiere solo a la supervivencia, sino a la capacidad para regresar en poco tiempo a un nivel de operación normal.

8. La privacidad de los datos

La privacidad de los datos seguirá siendo una de las tendencias en gestión de riesgos. Sin embargo, es probable que el foco deje de estar sobre el RGPD. Dos razones para que esto sea así: la publicación de regulaciones y leyes similares alrededor del mundo y aparición de nuevas formas de atacar los sistemas de las empresas, que aún no cuentan con herramientas efectivas para contrarrestarlas.

El desafío para los equipos de riesgos será mantenerse al día con los cambios regulatorios alrededor del mundo, pero también con los avances tecnológicos que, desafortunadamente, no se limitan a los aspectos positivos.

9. Teletrabajo y trabajo remoto

El teletrabajo y el trabajo remoto ofrecen grandes oportunidades a empresas y trabajadores, pero también conllevan riesgos relacionados con la seguridad y la salud en el trabajo y con la seguridad de la información. Las tendencias en gestión de riesgos, en este campo, girarán en torno a la forma en que la organización puede ejercer controles y monitorear el trabajo sin llegar a ser intrusiva o invasiva.

Tomado de: https://www.escuelaeuropeaexcelencia.com/